El Gobierno yemení apoya a manifestantes en Irán
El Gobierno yemení arremetió este martes contra Teherán y vio el origen de las actuales protestas antigubernamentales en las «políticas criminales» contra el pueblo, al tiempo que mostró su apoyo a los manifestantes.
«Irán es escenario de un movimiento popular, debido a las políticas criminales contra sus ciudadanos y contra los pueblos árabes y musulmanes», aseguró el vicepresidente del Yemen, Ali Mohsen al Ahmar, cuyo gobierno está exiliado en Riad desde que fue expulsado por los rebeldes hutíes, según la agencia de noticias oficial yemení Saba.
Al Ahmar hizo estas declaraciones en una reunión con un grupo de diplomáticos estadounidenses en la capital saudí, a los que pidió que «aumenten la presión sobre Irán».
El Gobierno yemení encabezado por el presidente, Abdo Rabu Mansur Hadi, acusa a Teherán de apoyar a los rebeldes chiíes que le disputan el poder en el Yemen y que actualmente controlan la capital, Saná, y regiones del norte y el oeste del país.
Por su parte, el ministro de Exteriores yemení, Abdelmalik al Mejlafi, consideró en la red social Twitter que «la injusticia (que sufren) los iraníes bajo el gobierno de los mulás es la mayor injusticia en la región (de Oriente Medio), después de las injusticias (que sufren) los pueblos en los que interviene el régimen de Irán imponiendo guerras sectarias y milicias».
A su juicio, la «intifada iraní revela que el pueblo de Irán necesita vivir en paz y armonía con los demás pueblos de la región, lejos de los sueños locos del régimen de los mulás de exportar la revolución y la destrucción al resto de la región».
Al Mejlafi recordó que el Yemen sufre las injerencias iraníes y denunció su apoyo a las «milicias sangrientas y sectarias» de los hutíes, por lo que deseó que el pueblo iraní triunfe a la hora de «detener las aventuras extranjeras» de sus líderes.
Irán es escenario de protestas antigubernamentales desde el 28 de diciembre pasado en contra de la corrupción y la carestía de la vida, unas movilizaciones en las que han muerto al menos 20 personas y hay un millar de detenidos.
