ONU alerta del deterioro de la seguridad en Afganistán y pide diálogo
Naciones Unidas alertó este viernes del deterioro de la situación de seguridad en Afganistán y demandó a todas las partes de diálogo para poner fin al conflicto.
«Los choques armados continuaron sin cesar a comienzos de 2017 pese a los fríos meses de invierno. Estoy muy preocupado por los informes que apuntan a una intensa campaña de luchas en primavera», dijo el representante especial de la ONU para Afganistán, Tadamichi Yamamoto, al Consejo de Seguridad.
Yamamoto recordó que el año pasado se documentó el mayor número de bajas civiles en el país desde que Naciones Unidas comenzó a contabilizarlas hace casi una década y subrayó que es fundamental dar la vuelta a esa tendencia.
«Aunque las partes del conflicto han expresado compromisos para proteger a los civiles, hay que hacer esfuerzos concretos para asegurar que esas declaraciones se convierten en una protección real», apuntó.
El deterioro de la seguridad ha disparado también el número de desplazados internos, con más de 650.000 en 2016, el número más alto registrado hasta ahora, y una cifra parecida a la que se espera para este año.
El representante de la ONU insistió en que «no hay una solución militar» para el conflicto afgano y defendió que prolongar la guerra sólo llevará más miseria al país.
En ese sentido, subrayó la necesidad de negociaciones de paz y dijo que el Gobierno y la comunidad internacional deben reforzar el mensaje de que los talibanes pueden ser parte del futuro de Afganistán.
El grupo, mientras, debe aceptar entablar conversaciones de paz sin condiciones previas, opinó.
«Un conflicto y una violencia sin fin son simplemente inaceptables. Todos tenemos que hacer de la paz nuestro nuevo y absoluto imperativo», insistió Yamamoto.
La reunión del Consejo de Seguridad de la ONU sobre Afganistán se abrió con un minuto de silencio en recuerdo de las víctimas de los recientes atentados en el país, incluido el perpetrado esta semana por el grupo yihadista Estado Islámico (EI), que dejó casi medio centenar de muertos en un hospital militar de Kabul.
