Venezolanos también han realizado solicitudes de refugio a Honduras
Honduras ha recibido unas 267 solicitudes de refugio entre 1998 y 2016, indicó un informe presentado en Tegucigalpa en un evento en el que la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur) lamentó la poca generosidad del mundo para reconocer la condición de refugiado.
El estudio «Diagnóstico Participativo de las Personas Refugiadas y Solicitantes de la Condición de Refugiado en Honduras» fue presentado este martes por el Instituto Nacional de Migración (INM), y analiza las necesidades de protección de los refugiados y los obstáculos existentes para el alcance de soluciones duraderas.
El documento señala que entre 1998 y 2016 unas 39 personas han sido reconocidas como refugiadas en Honduras, mientras a otras dos se le denegó su solicitud por causas no precisadas.
La directora del INM, Carolina Menjivar, dijo en la presentación del estudio que las solicitudes de refugio presentadas en Honduras son de ciudadanos de Nicaragua, El Salvador, Venezuela y Haití.
Señaló que en 2016 Honduras registró 26.239 adultos extranjeros y 1.625 niños y adolescentes que ingresaron al país de forma irregular, algunos de ellos con rumbo a Estados Unidos.
Esas cifras «nos plantean con más fuerza la solidaridad y los nuevos retos en materia de protección internacional presentan los países», subrayó Menjivar.
La presentación del estudio coincide con la celebración este martes del Día Mundial de los Refugiados.
Según el documento, las 19 personas refugiados o solicitantes de esa condición consultadas para esta investigación reportaron «tener acceso al sistema nacional de salud, sobre todo en los centros de salud comunitarios».
Destaca que la legislación hondureña «no cuenta con un marco jurídico específico» para que las personas reconocidas como refugiadas en Honduras tengo acceso a una vivienda en el país, por lo que esos ciudadanos denunciaron ser víctimas de «discriminación y desconfianza» durante la búsqueda de una casa.
El representante de Acnur en Honduras, Andrés Celis, alabó el informe al afirmar que permite «ver qué es lo que han necesitado» las personas refugiadas en el país, «qué han encontrado al llegar, y en qué cosas se ha mejorado» en los últimos años.
Señaló que, según cifras de Acnur, en 2007 unos 1.100 hondureños fueron reconocidos como refugiados, en países que no fueron identificados, mientras que a finales de 2016 el número se incrementó a 10.288.
A ellos se suman otros 34.000 hondureños que han solicitado refugio en los últimos años en «un mundo que no esta siendo tan generoso en general con reconocer la condición de refugiado, pero en el cual el 60 % de los nuevos reconocimientos se ha logrado en los dos últimos años», enfatizó Celis.
Destacó además que en los últimos años se ha reportado un «mejoramiento de las condiciones de asilo en la región», lo cual ha permitido que personas que huyeron de sus países en busca de protección hallan encontrado «en el refugio una opción para alcanzar su protección».
El informe sugiere mejorar el acceso y goce al derecho de asilo, fortalecer el rol institucional del Instituto de Migración, así como mejorar el procedimiento para la determinación de la condición de refugiado en Honduras.
También recomienda promover una campaña de «sensibilización y concienciación» sobre los derechos y deberes de los refugiados para fortalecer su protección e impulsar programas de políticas públicas y privadas para facilitar el acceso de estas personas al mercado laboral, la educación, la salud, vivienda y seguridad
