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En 65% se incrementó en el 2017 deserción estudiantil en la ULA

Nora Sánchez – Mérida.-

@norasan16 

El director de Asuntos Estudiantiles (DAES) de la Universidad de Los Andes (ULA) en Mérida, Marcos Pino, informó que al finalizar el año 2017 la deserción estudiantil en esta casa de estudios aumentó a 65%, lo que se traduce en más de 25 mil estudiantes que han abandonado sus estudios por la crisis del país desde el año 2015.

Pino dijo que durante las últimas semanas de clase los salones de 50 alumnos estaban ocupados por 15 o 20 estudiantes, ya que el resto decidió dejar de estudiar para trabajar y ayudar con los gastos de la familia que no lo pueden mantener en otra ciudad o irse del país a obtener una mejor forma de vida, dada la crisis humanitaria por la cual atraviesa Venezuela.

El director de DAES expresó que es triste y doloroso como “la crisis humanitaria nacional afecta a los padres de los estudiantes y los afecta a ellos en la universidad, los estudiantes tienen grandes dificultades hasta para obtener la alimentación en los comedores y tan solo un sábado y domingo, cuando no funciona el comedor, gastan más de 200 mil bolívares en alimentación”.

Pino aseguró que la crisis humanitaria nacional tiene al borde del colapso a las universidades y a los estudiantes quienes no tienen dinero para pagar habitación que cuesta alrededor de los 150 mil o 200 mil bolívares, costearse la alimentación, el transporte y además las condiciones de las universidades cada vez son peores en oportunidades porque ni internet le pueden garantizar al estudiante por razones como robo de cables, fallas constantes del servicio, entre otras.

La crítica situación económica que en el año 2016 afectó a los estudiantes que desertaron de todas las universidades del país en 50% aproximadamente, hoy día obliga a los jóvenes a no regresar a las aulas de clase luego del receso académico y en otros casos a irse fuera del país, para incrementar en 15% el porcentaje de ausentismo.

Trujillo el núcleo con más deserción

De los núcleos de la ULA en la que se acrecienta la deserción estudiantil, Marcos Pino señaló al Núcleo Universitario “Rafael Rangel” del estado Trujillo.

Según un estudio realizado por DAES, eso ocurre por el estrato socioeconómico que existe en la localidad pues la mayoría de los estudiantes son de bajos recursos y porque el núcleo está retirado de la ciudad de Trujillo, lo que aumenta los costos de traslados debido a los elevados precios de los pasajes.

Sin precisar en número la cifra de estudiantes que han abandonado las aulas porque algunos jóvenes se retiran oficialmente y otros se inscriben para tener algunos beneficios como el comedor, pero no asisten a las aulas de clase, Marcos Pino aseguró que hay desanimo y angustia en los estudiantes por la crisis estudiantil.

“La deserción ha traído angustia, ansiedad, depresión, eso lo vemos en las consultas de psicología y orientación de DAES, hay desesperación en los jóvenes por no alcanzar las metas, cuando se les pregunta si tienen intención de irse del país, más del 60% de los encuestados responde con un si rotundo”, resaltó Marcos Pino.

Cada vez son menos los estudiantes que acuden a las facultades de la ULA
Cada vez son menos los estudiantes que acuden a las facultades de la ULA

Becas indignas

Ni las becas estudiantiles que otorga el gobierno nacional y que el pasado mes de noviembre incrementó a 80 mil bolívares, es paliativo para la crisis que viven los estudiantes.

El director de DAES calificó las becas de indignas y aseguró que en la ULA aún hay quienes cobran 12 mil, 15 mil y 18 mil bolívares de beca, “con lo que no se compran ni un caramelo”, aseguró.

Dijo que el gobierno no ha pagado el aumento del mes de junio a 40 mil bolívares cada beca y desconoce cuándo pagará el aumento reciente, del que además sabe que no resuelve nada.

El profesor recordó que en su época de estudiante, en la década de los años 80, una beca oscilaba en 10 dólares (400 bolívares) con los cuales se pagaban necesidades de estudio, residencia y hasta alcanzaba para la recreación.

“Las becas de ahora no llegan ni a un dólar, 80 mil bolívares no son ni un dólar, así no puede sobrevivir ni mantenerse el estudiante”, resaltó al tiempo que consideró que el monto de una beca estudiantil debe ser de 500 mil bolívares o de un millón de bolívares.

El hambre los aleja de las aulas

Para el coordinador juvenil de la organización Vente Venezuela en Mérida, Luis Villareal, las cifras de deserción estudiantil son alarmantes.

Señaló que ña principal causa de la deserción “es el hambre” pues dijo que muchos estudiantes no tienen dinero para comer los días en los que no funciona el comedor universitario.

De mantenerse la situación económica la cifra de deserción estudiantil puede alcanzar el 80% en los próximos meses, según Villareal, quien informó que la Universidad del Zulia (LUZ) es la más afectada por la deserción, seguido del núcleo universitario de la ULA de Trujillo y por el núcleo La Liria de Mérida, el cual comprende las facultades de Humanidades, Ciencias Económicas y Sociales y Ciencias Jurídicas y Políticas.

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