Joven de Vargas con tumor cerebral requiere ayuda para retomar tratamiento médico

Marighzell Lucena – Vargas.-

@mlucena15

A sus 19 años de edad, la joven varguense Soiré Jazmín Mesa Ladera, expresa muy bien todo su deseo de superación y crecimiento personal. Para ella, los sueños no tienen límite mientras exista la voluntad y esfuerzo de llevarlos adelante. Pese a que un tumor cerebral desde hace al menos 13 años, le ha quitado la visión, su optimismo ante la vida es sinónimo de ejemplo para quienes la rodean y en especial para su abuela Dionida López, que por circunstancia de la vida debió asumir su crianza.

En medio de condiciones de vulnerabilidad, en lo más alto del sector conocido como La Bloquera, en la parroquia Carlos Soublette, esta joven pasa sus días en compañía de sus familiares y vecinos. Aunque al momento de ser diagnosticada con la enfermedad, pudo ser sometida a dos intervenciones quirúrgicas y acceder al tratamiento requerido, siendo atendida en hospitales como el Miguel Pérez Carreño, el Militar de Caracas y el Oncológico Luis Razetti, la situación país ha impedido que desde hace al menos dos años, vuelva a ser evaluada por un médico.

“Antes podía ir con ella a las consultas y a las quimio, pero con la situación como se ha puesto, si acaso nos alcanza para comer. No hemos podido retornar para ver en qué estado ha venido avanzando la enfermedad, que aunque le ha robado la visión, no le ha quitado el optimismo y las ganas de seguir. No contamos con los recursos para movilizarnos a Caracas y menos con la situación que se vive del transporte público”, explica la abuela.

Para Soiré, el único acercamiento que ha tenido con los doctores, ha sido gracias al apoyo de fundaciones como Sopa Para Un Hermano, que en jornadas especiales asisten a cerca de 50 personas entre niños y adultos, de esa comunidad, cada cierto tiempo. Los problemas nutricionales agravan aun más su condición de salud, de tal manera, que a simple vista se pudiera imaginar que cuenta con mucho menos edad de la que tiene.

Su ceguera no le ha restado el deseo de poder soñar y creer que puede contar con un mejor futuro, ignorando incluso las condiciones de precariedad que la rodean. Con su canto, en más de una ocasión alegró el día a muchos de los enfermos con los cuales compartía habitación, el tiempo que requirió estar hospitalizada. Se espera que en la medida de lo posible, se encuentre la ayuda necesaria para la realización de estudios médicos y retomar el tratamiento.

Como muchos otros venezolanos, hoy espera por una mano amiga que le ayude a recuperar su salud y aunque está consciente de la difícil situación por la que atraviesa, nunca ha perdido la fe ni la esperanza. “Uno de mis sueños es poder aprender a leer el sistema braille, quiero volver a estudiar; apenas tengo vagos recuerdos de cuando cursaba segundo o tercer grado; luego vino la enfermedad y aunque fui perdiendo la visión, no he perdido las ganas de vivir ni de ser alguien en la vida”, afirma Soiré.

Quienes deseen contribuir o brindar su apoyo a esta joven varguense, puede comunicarse a través del 0414-0320756.