Nueva alerta epidemiológica sobre difteria y sarampión
La Sociedad Venezolana de Salud Pública y la Red Defendamos la Epidemiología Nacional y la Sociedad Venezolana de Medicina Interna, han trabajado para divulgar a la población los lineamientos de vacunación para la eliminación y control de las epidemias de sarampión y de difteria que azotan a nuestro país.
Estas mismas instituciones denuncian que el Ministerio del Poder Popular para la Salud (MPPS) continúa en su conducta «omisiva» al no publicar este documento oficial, incumpliendo sus obligaciones de informar efectivamente a la población, sobre temas de salud pública de vital importancia. Es el caso de los lineamientos de vacunación, indispensables para prevenir ambas enfermedades que no están disponibles en el portal electrónico del MPPS, cuyo acceso es impedido desde mayo de 2017.
Los títulos aplicados oficialmente a este documento, (interrupción del brote de sarampión y el control del brote y la disminución de la mortalidad por difteria) deliberadamente, buscan desinformar a la población al pretender desestimar la gravedad e importancia de los eventos de salud que significan la re-emergencia de la difteria y el sarampión en Venezuela, al denominarlos ¨brotes¨, cuando la dolorosa realidad humana y científica, claramente indica que por su gravedad, extensión y duración se se trata de epidemias, en este momento superpuestas, con graves consecuencias de sufrimiento y muerte para la población no adecuadamente protegida mediante vacunas.
Entre los lineamientos de vacunación para el caso de difteria, se indica que su aplicación es en todo el territorio nacional y no en 9 entidades federales priorizadas, como informó el Licenciado Luis López ministro del MPPS, el 6 de noviembre pasado, mientras que para el caso de sarampión se prioriza a nueve estados, (Bolívar, Delta Amacuro, Monagas, Sucre, Anzoátegui, Guárico, Amazonas, Apure y Aragua), cuando oficialmente solo se reconoce la transmisión de la enfermedad en un solo estado. (Bolívar).
Estas inexcusables discrepancias indican que los lineamientos se elaboraron para territorios y poblaciones mucho mayores, por lo que la diseminación de la enfermedad y el número de personas expuestas y afectadas es mucho mayor. Solo en esas condiciones es justificable la aplicación indiscriminada de vacunas y la ampliación de los grupos de edad de la población meta a vacunar como señala el documento.
