Crohn, ¿qué hacer cuando se tiene?
La enfermedad de Crohn es una inflamación crónica que presenta en el tracto digestivo. Lo recomendable para curarla es seguir el tratamiento recetado por el médico, comer balanceadamente y llevar un modo de vida saludable.
La enfermedad
Se da esta patología cuando el sistema inmune de la persona empieza a actuar en contra de sus tejidos. El revestimiento del intestino puede aumentar y provocar que el conducto se estreche. Por lo angosto, la digestión se hace más lenta. Aún no se conocen las causas del ataque.
Con la enfermedad de Crohn hay daños en cualquier segmento desde la boca hasta el ano (tracto digestivo), originado por un proceso inflamatorio. La mayoría de las veces el intestino delgado y algunas zonas del colon y del recto son las partes lesionadas, según el gastroenterólogo Gustavo Yasin.
El especialista indicó que “lo más característico es la diarrea crónica, no necesariamente con sangre. También está el dolor abdominal, no siempre de fuerte intensidad, pero recurrente. Otros síntomas son la aparición de úlceras en la boca, lesiones perianales ulceradas o fistulosas, fiebre, cansancio fácil y dolor en las articulaciones”.
La persona con Crohn
• Pierde progresivamente su estado de salud.
• Pierde peso.
• Presenta desnutrición.
• Puede tener anemia (porque el intestino inflamado no absorbe óptimamente los nutrientes).
“Comúnmente se presenta en individuos jóvenes, en la segunda o tercera década de vida, pero puede aparecer a edades más tardías. Otro rasgo es que afecta en una mayor proporción a personas de raza blanca, siendo frecuente en la población judía fuera de Israel”, dijo Yasin.
Tratamientos terapéuticos
El tratamiento depende de cada paciente y su condición clínica. Algunos tienen períodos de remisión, cuya reaparición es impredecible. Por eso es importante cumplir con la terapia para evitar complicaciones, señaló el gastroenterólogo, y enfatizó que “interrumpir sin supervisión médica un tratamiento que viene siendo efectivo no hará que al reanudarlo sea exitoso como en el principio”.
Yasin explicó que los “pacientes con pocos síntomas generalmente se tratan con esquemas más simplificados. La cirugía se reserva para complicaciones, como fístulas y estenosis (estrechamiento de conducto), ayudando a resolver la situación de emergencia, sin modificar la historia natural de la enfermedad”.
Hasta ahora no se conocen alimentos que causen la inflación intestinal, pero la diarrea y los cólicos se pueden agravar con el alcohol, las especias picantes, las comidas grasosas y los productos lácteos. Los que padecen la enfermedad tendrán que seguir una dieta especial indicada por un especialista.
Con información de Comstat Rowland Comunicaciones Estratégicas.
