Carlos Antonio León: “Soy el único que viene de afuera a hacer cine en Venezuela”

El criollo que interpreta a “Casanova en la producción cinematográfica “Los Ocho-Seis”, acaba de ganar un premio como Mejor actor protagónico en el Social Machinery Film Festival, celebrado en Salerno, Italia, por su participación en la película “Ann”, donde interpretó a una transgénero

El pasado 24 de febrero se estrenó en Venezuela el filme de acción “Los Ocho-Seis”, en donde pudimos apreciar el trabajo, no sólo como actor, sino como productor, del actor venezolano, radicado en EEUU, Carlos Antonio León. En esta cinta de corte nacional, León interpreta a “Casanova”, un hombre de barrio, que gracias a su astucia y “conexiones”, llega lejos en su carrera criminal.  León fue invitado a participar en este filme por su amigo, el también actor y productor, Thomas Piedra, quien se dio un viaje hasta Hills, en California, para presentarle el proyecto, y así poder contar con la presencia y el apoyo de León.

Eventualmente, el proyecto tomó forma cuando agregan a un tercer socio en la producción ejecutiva, David Da Silva, quien junto a Claudia Lepage (La Distancia Mas Larga) conformaron el equipo de producción de este dinámico filme, dirigido por Javier Mujica. Anteriormente Carlos Antonio León ya había participado en otros filmes de corte nacional, tales como “De Repente la película”, bajo el mando del maestro Luis Armando Roche; y “Complot”, dirigido por el controversial Jackson Gutiérrez, y en donde León sólo hizo un «cameo», a la vez que fungió como productor ejecutivo.

«Siempre estoy en producciones poco convencionales; en ‘De Repente’ hice un personaje que habita en una historia absurda e hilarante, un homenaje fílmico a Ionesco y los KeyStone Cops del cine de los años 30. Roche quería hacer el film 100% improvisado, y nos sorprendía todos los días con direcciones completamente inesperadas. En ‘Complot’ hice a un detective, pero bajo la técnica del cine ‘guerrilla’, la cual también es inesperada, inusual, y sorpresiva para los actores. ‘Los Ocho-Seis’ es un film más estandarizado, que cumple más las reglas de las filmaciones regulares”, acota León.

Sin embargo, lo irregular lo continuó cuando su amiga, la directora venezolana Carla Forte, le propuso el protagónico de su pieza “Ann”, en la ciudad de Miami. “Carla escribió este guión hace más de 8 años, y lo tituló ‘Imagimundo’, pero eventualmente se decidió por llamarlo ‘Ann’, y me pidió que lo leyera. Me encantó el personaje de ‘Rubén’, pero luego me dicen que éste ya estaba casteado. Para mi sorpresa, Carla me estaba proponiendo el personaje femenino”, exclama León. “Me costó procesar la propuesta, nunca me habían ofrecido algo tan radical, pero luego me di cuenta del valor artístico de ese personaje”.

León tuvo que hacer varios cambios físicos para crear este personaje, como perder unos kilos, bajar un poco su musculatura, retomar el baile, ya que “Ann” es bailarina, dejarse crecer el cabello, y luego ponerse extensiones permanentes, etc., para poder darle una imagen mucho más honesta a el transgenderismo de “Ann”. Fue tan contundente su actuación, que se hizo merecedor del premio como Mejor Actor Protagónico del Social Machinery Film Festival, realizado en Salerno, Italia.

Pero eso sólo era el principio del reto, ya que la película estaba diseñada para que se filmase en sólo cinco días, algo casi imposible para un largometraje. Aparte de eso, León también tendría a cargo un segundo personaje femenino, “Ana Ángel”, una especie de demonio que sólo existe en la mente de su pareja, “Rubén”, y que causa el caos entre los dos amantes. “Ann” está haciendo un recorrido por varios festivales de cine del mundo, incluyendo el de Cine Venezolano en New York, y tendrá su premier en EEUU en el Festival Internacional de Cine de Atlanta en su edición número 41.

Carlos Antonio León se ha dado el gusto de haber  trabajado en producciones internacionales haciendo de vampiro en “Shadowland”; zombie en “Sound of Nothing”; transgénero en “Ann”; y hasta como el “Guasón” en el fan-filme “The Dark Night Returns”, el cual salió vía YouTube, y donde tuvo un éxito tan grande que ya están preparando una segunda parte, en donde León podrá ejercitar sus músculos histriónicos interpretando a uno de los personajes más iconoclastas del cine.

– ¿Sigues creyendo en Venezuela para producir películas y actuar en ellas?

– ¡Totalmente! Nuestro cine ha crecido enormemente gracias a gente que lucha por mantenerlo con mucha calidad. Es duro hacer cine, no sólo en Venezuela sino en todos lados. Pero el caso Venezuela es particular por la precaria situación económica del país, lo cual hace que muchos productores prácticamente hagan magia para poder finalizar sus proyectos. Los precios suben, el financiamiento baja, es una lucha titánica poder cumplir con todos los requisitos que conlleva el hacer cine. Pero yo siempre he sido muy positivista. Quizás soy el único actor venezolano que comenzó haciendo cine fuera de Venezuela, y regresó al país en tiempos cuando todos están buscando la forma de irse. Ese detalle debería ser más que suficiente para que la gente sepa lo mucho que me gusta el cine de mi país y cuanto lo apoyo.

– ¿Qué extrañas de tu país?

– Extraño como éramos. Los modales, las sonrisas en las caras de la gente en las calles, la humildad (hay mucha soberbia y altanería hoy día, mucho «sábelo todo»), extraño montarme en transporte público con mis panas e irnos para Chichiriviche o Bahía de Cata sin planearlo y sin rollos. Extraño las empanadas en Puerto La Cruz, comerme unas cachapas en el Guapo, tomar canelita en la plaza de mi pueblo natal. El Alto en Escuque, escuchándole los cuentos a los locales, y a veces extraño el venezolano que fuí, menos “agringado” y más «provinciano». Con la madurez uno cambia y se pone más juicioso, y a veces quisiera volver a ser el loquito que fui. Tenía mucho menos, pero no me hacía falta nada. Extraño esos días.

– ¿Piensas en llegar a Hollywood con alguna de las películas donde has trabajado?

– Hollywood lo haces tú mismo. Y lo haces en cualquier lado: Francia, Brasil, Argentina, etc. Existe ese mito que para llegar hay que hacerlo solamente en Hollywood. Yo viví allí, conocí mucha gente famosa, y todos están buscando trabajo igual que tú y yo. De repente estas “arriba”, y de repente no te llaman más nunca. Lo vi mucho, la gente “de repente” desaparece y no trabajan más, y lo peor es que nadie los extraña. Eres “reemplazable” en todo momento. Yo no me mentalizo con Hollywood, simplemente trabajo, y si algo llega, bienvenido sea, sino sigo trabajando. No me quita el sueño.

– ¿Qué fue lo más difícil de hacer esta película “Los 8-6”?

– ¡Muchos actores! Son demasiados personajes y coordinar tanto talento junto es muy duro. Además el film se filmó mayormente en las noches, y ya sabemos lo difícil de la Caracas nocturna. Recrear el vibe de los 80’s también fue un reto; 6 semanas de rodaje con las dificultades de un país como Venezuela donde el dólar sube y baja sin cesar, es cansón y estresante.

– ¿Qué viene después de «Los 8-6»?

– Tengo un film experimental llamado “Ann”, filmado en USA, bajo la dirección de Carla Forte. Pronto me integro al elenco de “Blindado”, dirigida por Carlos Malavé, y en el otoño me uno al cast del film estadounidense “Retribution”, en donde tengo un personaje del lejano Oeste.