Despiden a 12 trabajadores del Metro de Caracas por razones políticas
Jesús Abreu/María Fernanda González
Arco Laboral se ha convertido en la más importante referencia sindical en el Sistema Metro de Caracas, la característica que los define y marca es que no son cercanos a las autoridades del subterráneo y más bien han venido adversando a Francisco Torrealba, Edinson Alvarado y compañía desde hace varios años.
Aseguran que Torrealba, Alvarado y otros que han asumido la representación laboral y la dirección del Metro de Caracas son hoy los principales responsables de las fallas del sistema y las deficiencias del servicios además de que «no han nada» por mejorar las condiciones de los trabajadores.
Tras la derrota el 6 de diciembre del gobierno en la Asamblea Nacional (AN), se desató en el país una «casería de brujas» contra trabajadores de la administración pública, así lo han denunciado desde distintos espacios y en el Metro de Caracas no escaparon a esta situación.
Wuilson Gutiérrez, líder de Arco Laboral, y otros 11 compañeros suyos son las primeras víctimas. El sábado (15/10), a las manos de sindicalista, llegó una comunicación en la que le queda «prohibida» la entrada a las instalaciones del Sistema, tras haber sido despedido de su cargo.
Consultado sobre si había sido notificado de esta decisión o si había sido llamado para solicitarle la renuncia o abierto un expediente administrativo en su contra, Gutiérrez aseguró que se encuentra de vacaciones y conoció del despido porque «un compañero me llamó y me dio una copia de este documento».
El documento firmado por el Gerente de Protección y Seguridad del Metro de Caracas, Moisés Vargas, indica que se trata de una decisión para «proteger» la buena imagen «revolucionaria» del subterráneo. Jorge Álvarez Casañas, quien se encuentra de reposo relató que supo que había sido despedido porque «el 10 de octubre fui a un cajero a sacar dinero y no me habían depositado».
«Al llamar para informar sobre la irregularidad la gentil persona que me atendió me comunicó que me encontraba suspendido de la nómina y debía acudir a la oficina de relaciones laborales a fin de regularizar mi situación», explicó Alvarez Casañas.
Los 12 trabajadores despedidos del Metro de Caracas y la representación del movimiento Arco Laboral acudirán el próximo miércoles a la sede de la Asamblea Nacional (AN), en Pajaritos para denunciar ante la Comisión de Desarrollo Social y exigir al parlamento que investigue la situación del sistema de transporte subterráneo.
Persecución laboral
En una entrevista televisiva en canal Vive TV, el presidente del sindicato de trabajadores del metro de Caracas, Edisnson Alvarado, aseguró que había una lista con los nombres y apellidos de los empleados de la compañía de transporte subterráneo que firmaron en el proceso de recolección del 1%, para solicitar la activación del referéndum revocatorio presidencial. Asimismo, Alvarado expresó en redes sociales lo que distintos representantes del oficialismo, como el propio diputado y dirigente del partido Socialista Unido de Venezuela, Diosdado Cabello, reiteraron tras a recolección del 1%.
El coordinador nacional del Frente Autónomo en Defensa del Empleo, Salario y el Sindicato (Fadess), Dick Guanique, califica la situación como una violación a los convenios que el Estado venezolano suscribió ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
«Es una arremetida de terrorismo laboral por parte de las autoridades del Metro de Caracas contra los trabajadores. La represión anunciada hace un tiempo atrás y promovida por el presidente del sindicato ya surtió su efecto y un grupo de trabajadores han sido despedidos sin justificación alguna, violando la estabilidad y el decreto de inamovilidad laboral, violando los procedimientos normales y administrativos para calificar y despedir a un trabajador; además se viola el Convenio 111 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que prohíbe los despidos por persecución o razones políticas».
En un medio de comunicación interno de los trabajadores denominado MetroBemba, calificado como clandestino por quienes conforman el movimiento sindical y laboral contrario a la tendencia oficialista, reiteraron el rechazo a las medidas ejecutadas por parte de la directiva de la empresa de transporte subterráneo.
