Habitantes de Puerto La Cruz buscan con desespero dinero en efectivo
Ysamira Salazar González
@ysamira
A tan solo cinco días para la llegada de la Navidad, los habitantes de Puerto La Cruz (Municipio Juan Antonio Sotillo) del estado Anzoátegui, se encuentran desesperados por la ausencia de dinero en efectivo.
Durante la mañana de este lunes, se registraron largas colas a las puertas de las entidades bancarias, al igual que en los puntos de cajeros electrónicos, y todo con un solo fin: obtener algo de dinero efectivo para los gastos de la semana.
Los habitantes de la zona dan vuelta por varios bancos y hasta han destinado el día para conseguir dinero en efectivo, con la finalidad de que las fiestas decembrinas no los agarren «sin nada de plata»; necesaria para pagos menores como el transporte público, gasolina, estacionamientos y otros.
Milagros Méndez, habitante de la ciudad porteña, destacó que desde temprano de la mañana salió a la calle en la búsqueda de dinero.
“Me han comentado que por taquilla los banco algunos están dando 5 mil y otros 10 mil bolívares, cantidad que no me alcanza para nada. Pase más de una hora y media en la cola de un cajero para poder sacar de dos tarjetas algo de plata”, dijo la usuaria.
Por su parte, Vladimir Castro, caminó todo el Mercado Municipal de Puerto La Cruz y se dirigió también a varios cajeros en busca de efectivo.
“Conseguí dinero en un negocio dentro del mercado, donde logré hacer un avance porque las colas en los cajeros automáticos están demasiado largas”, destacó.
En los comercios
Además, tras la carencia del “sencillo” hasta los comerciantes se las han tenido que ingeniar para poder vender. Algunos, están recelosos para agarrar los billetes de 100 bolívares ya que dentro muy poco tendrán que depositarlos de nuevo. Otros vendedores para quitarse el «dolor de cabeza» solicitan que el pago de las compras se las haga por puntos de ventas.
Pero este último, como lo asegura, Jenny Figuera, encargada de una tienda, también colapsa y las operaciones no se pueden realizar o se tardan mucho. «A veces los clientes dejan lo que adquieren encima del mostrador por no perder más su tiempo».
