Economía

Los cepalinos y la mano visible del gobierno

(%=Image(3078168,»L»)%)
Montevideo (AIPE)- El filósofo Karl Popper (1902-1993) afirmaba que el modo de obtener conocimiento es a través de nuestros errores. Sin embargo, el dicho popular afirma que “el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra”. ¿Quién tiene la razón?
Creemos que ambas aseveraciones contienen parte de la verdad. El eslabón que une a las dos ideas, aparentemente contradictorias, es el siguiente: la gente aprende de sus equivocaciones siempre y cuando sufra en carne propia las consecuencias de su accionar. Si esto no sucede y los “platos rotos” los pagan otros, entonces, parafraseando al recién fallecido Jean-Francois Revel, diríamos que es “conocimiento inútil”.

Estos pensamientos vinieron a mi mente cuando, con incredulidad e indignación leí las declaraciones de José Antonio Ocampo, secretario adjunto de las Naciones Unidas para Asuntos Económicos y Sociales. En el marco de la primera “Jornada Nacional sobre desarrollo” realizada en Montevideo, el funcionario expresó en una entrevista que él considera que América Latina debe defender de forma mucho más agresiva sus monedas y aplicar subsidios a sectores de la tecnología, como hacen los países asiáticos.

Ocampo, quien fue secretario ejecutivo de la CEPAL entre 1998 y el 2003, explicó que habría que aplicar una nueva política de subsidios en la región, con el objetivo de “fomentar la innovación y las cadenas productivas” y, de ese modo, “reducir las diferencias tecnológicas que hoy existen entre las grandes compañías y las pequeñas y medianas empresas». Opinó que «una política de ese tipo contribuiría a un mayor crecimiento de la economía, ya que esto no ocurre sólo con un aumento de las exportaciones”.

Cree que es bueno que sean los gobiernos y no el mercado quien determine las tasas de cambio entre diferentes monedas y mencionó a la Argentina como un ejemplo a seguir.

Considera que para que América Latina pueda despegar se requiere de una política de desarrollo productivo. “En el período de sustitución de importaciones nosotros creamos políticas de desarrollo productivo. En promedio fueron exitosas… lo importante del resultado en materia de crecimiento y de inversión es que había una política explícita dirigida a promover nuevos sectores productivos. Se hacía a través de protecciones.”
Pero como reconoce que el mundo ha cambiado y es imposible actualmente aplicar esa política, propone aplicar lo que llamó “subsidio a la inversión”. Básicamente se trata de que aquellos sectores que el gobierno quiere estimular pidan créditos bancarios, y si el proyecto no tiene éxito, los fondos públicos lo cubrirían.

Coincidió en Uruguay el exitoso empresario chileno Oscar Garretón, quien fue subsecretario de Economía (1970-1972) en el gobierno de Salvador Allende, quien también concedió entrevistas a la prensa. Vale la pena contrastar las ideas de estos dos personajes.

Garretón manifestó que recuerda la década de los años 70 “con angustia”. Declaró que la izquierda chilena tuvo un largo y temprano proceso de autocrítica que desembocó en una renovación. Llegaron a la conclusión que la economía abierta al mundo es el mejor instrumento para luchar contra la pobreza y la desigualdad. “La economía de mercado, después del siglo pasado violento y corto, quedó claro que, con todas sus debilidades, injusticias, etc., es mejor que la planificación central comunista. Seguir defendiendo una planificación centralizada no es ser consecuente, sino no ser capaz de ver lo que pasó realmente (…) No se aprende a competir sin competencia. Los empresarios han tenido que aprender a competir (…) en América Latina la experiencia de la economía cerrada la conocemos desde hace unos 50 años. Entonces, ¿hay que experimentar con eso? Si ya lo conocemos, terminamos cada decenio con un informe de la CEPAL que hace referencia a la década pérdida”.

Los cepalinos promueven “políticas de desarrollo” y cuando los países las cumplen y obtienen resultados nefastos, ponen cara de “yo no fui”. La consecuencia es el dolor y la miseria para amplias capas sociales, mientras que los funcionarios responsables son ascendidos de la burocracia nacional a la internacional, donde no pagan impuestos y son retribuidos con suculentos estipendios.

¡Cuánta injusticia y, sin embargo, así funciona la realidad latinoamericana!
___* Analista uruguaya.

Fundado hace 28 años, Analitica.com es el primer medio digital creado en Venezuela. Tu aporte voluntario es fundamental para que continuemos creciendo e informando. ¡Contamos contigo!
Contribuir

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba