Mundo Empresarial

Emprendimiento: La psicología del éxito

Por Rogelio Queijeiro Taboada

De algún modo, todos tenemos una idea de lo que entendemos por “Éxito”, y todos, unos más y otros menos, trabajamos en función de alcanzar ese “ideal” de éxito. Es justo el momento de replantearse lo que ha entendido por Éxito, hasta ahora.

La próxima vez que usted se sienta frustrado con su emprendimieto, trate de concentrarse más en lo que piensa, y por qué lo piensa, y menos en la dinámica de su empresa. Entiendo que ésta es la mejor manera para volver a enfocarse en lo que desea, sino también, para mantenerse a flote y no “tirar la toalla”.

Ser exitosos requiere que nos demos cuenta que somos lo que definimos en nuestras propias vidas, en nuestro destino y trazamos el camino. Debemos seleccionar conscientemente un camino que facilite el tomar conciencia, tanto individual como colectivamente, como empresa.

Todo en la vida está interconectado. A medida que evolucionamos, nuestras relaciones, trabajo y vidas florecen. Y, a la inversa, a medida que nos afectan nuestras relaciones y nuestro trabajo, evolucionamos. Entender que no hay nada más precioso que nuestro destino, y que lo hacemos cada día. Esto es el éxito.

Es casi tautologico afirmar que todo emprendedor debe ser optimista, ya en otra entrega habíamos sugerido algunas recomendaciones para reforzar la necesidad del optimismo y por ello, resulta más que obvia la recomendación de mantener el pensamiento positivo y el optimismo en nuestra gestión empresarial.

emprendimientos-exitosos-enPues ahora resulta que, muy recientemente, científicos de la Universidad de Standfor han demostrado que el cerebro trabaja significativamente mejor cuando te centras en pensamientos positivos, eso te permite ser mucho mas brillante y creativo, y como bien señala Shawn Achor, de la Universidad de Harvard, “la felicidad nos lleva a grandiosos niveles de beneficios”. (Big Potential: How Transforming the Pursuit of Success Raises Our Achievement, Happiness, and Well-Being: 2018).

Cuando comencé como asesor en este campo, solía hablar con los nuevos emprendedores sobre la “imagen” de su emprendimiento que estaba en sus cabezas, de sus proyectos. Siempre centraba la conversación en las cosas materiales, el mundo tangible: el capital necesario, el personal necesario, las acciones de mercadeo y ventas, y en general de otros temas “estratégicos”.

Con el paso del tiempo, y después de presenciar de cerca – afortunadamente para mi – las experiencias de algunos de ellos, entendí que las dinámicas comunes de toda empresa, es decir, la selección del personal adecuado, el conocimiento de los ritmos de crecimiento empresarial, las estrategias de mercadeo y ventas que se adaptan mejor a su producto, y en fin todas los factores comunes al mundo empresarial y productivo, siempre, se resuelven mucho más fácilmente que los problemas de ánimo de quien emprende.

A medida que ha pasado el tiempo, y he tenido la oportunidad y el privilegio de ver como algunos proyectos han crecido en los últimos años, a pesar de las excepcionalmente difíciles circunstancias que caracterizan el medio ambiente empresarial venezolano, también yo he crecido en experiencias y conocimiento, y estoy convencido que, como bien señala Tony Robbins:

“El Éxito es 80% determinación y propósito, y el 20% aspectos técnicos y funcionales”

Cada vez que uno de mis casos estaba a punto de “tirar la toalla”, siempre pude infundirles ánimo reenfocando su forma de pensar, apartándoles en lo posible del pensamiento fatalista del porvenir, y centrando su atención en lo que está sucediendo ahora. Así, yo mismo crecí transformando el “Y ¿Qué tal está marchando el Negocio?” al “Cuéntame: ¿Cómo te has sentido con tu emprendimiento?”.

Ese cambio ha tenido inmensas consecuencias, y redireccionó nuestras conversaciones. Gracias a ello, me di cuenta que cuando lograba influir en que se sintieran optimistas sobre lo que estaba por venir, les estaba dando herramientas para manejar más fácilmente la gestión de inconvenientes y la “basura” a la que tendrían que hacer frente, casi a diario: inspecciones sin sentido, multas absurdas, funcionarios corruptos, sanciones por no tener permisos inexistentes, etc.

Agradezco esos momentos de “iluminación” pues gracias a ellos, he entendido que el sufrimiento y la angustia son opcionales, pues decidimos estar por encima de ellos, para obtener un beneficio extraordinario: La Sabiduría.

Foto: PIxabay
Foto: PIxabay

Creo que fue en ese momento cuando entendí que, el concepto de éxito para una empresa, en la Venezuela de los últimos años, puede resumirse en tener muy claro el concepto de “largo plazo”, ser “paciente” y no desesperar, y finalmente controlar nuestros pensamientos. El fatalismo no es tu aliado en los negocios.

Científicos de la Facultad de Medicina de la Universidad de Stanford han descubierto la vinculación directa entre una actitud positiva y el logro. Es el primer estudio científico en señalar los mecanismos neurocognitivos mediante los cuales la actitud positiva influye en el aprendizaje y el rendimiento académico.

La Escuela de Medicina de la Universidad de Stanford hizo publica su investigación en enero de 2018, a través de un estudio publicado por la Association for Psychological Science en el que demuestra, científicamente la manera como nuestro cerebro, a través del optimismo y el pensamiento positivo mejora sus procesos “mecánicos” relacionados con el éxito. «Tener una actitud positiva actúa directamente sobre tu memoria y sistema de aprendizaje», señala el estudio.

El estudio afirma ser el primero en evidenciar los mecanismos neurocognitivos mediante los cuales la actitud positiva influye en el aprendizaje y el rendimiento académico. Específicamente, la investigación identificó las formas en que una actitud positiva mejora las funciones del hipocampo, el área del cerebro responsable de la memoria.

El autor principal, Lang Chen, señaló que el impacto de la actitud positiva era mucho mayor de lo que habrían anticipado: «La actitud es realmente importante».

Los investigadores han explicado que la actitud positiva se manifiesta de múltiples maneras. Sus hallazgos demuestran que, independientemente del cociente intelectual, una actitud positiva puede ayudar a que mejore la memoria o disminuya la ansiedad, pero no garantiza el éxito. Esta investigación destaca un concepto que los líderes empresariales han enfatizado durante años: ser positivo genera buenos resultados.

«Las personas positivas no solo tienen un buen día, sino que lo convierten en un buen día»

«Las personas que piensan positivamente generalmente ven infinitas posibilidades»

Richard Branson

Ser Positivo, entonces es tener un comportamiento completamente distinto al que manifiestamente exhiben los repesentantes de esas autoridades a quienes debemos pedir permisos para desarrollar nuestras actividades económicas.

happyQuizás sea bueno dar ejemplo, y con nuestro comportamiento ejemplarizante, concentrarnos como empresarios positivos y exitosos en desarrollar brillantes cualidades como la humildad de la cual carecen quienes administran esos permisos y autorizaciones, no tratar de destruir a nadie, no pensar que somos los mejores, o mejores que nadie, y dar apoyo y entrenamiento a quienes nos acompañan en nuestra aventura emprendedora.

Los emprendedores humildes hacen todo esto porque ellos saben que de no haber tenido acceso a todas las herramientas académicas y financieras que han tenido la fortuna de aprovechar, y la inteligencia para desarrollar, no serían lo que hoy día son.Esa es la clave de su Liderazgo

La humildad, al contrario que la soberbia, tiene entre otros enormes beneficios la facultad de relacionarnos con absolutamente todo, en todos los niveles de la empresa, internos y externos: nadie se convierte en cliente de alguien a quien desprecia por soberbio, y la fidelización por dádivas, se acaba ta pronto como se acaban las reservas para “comprar voluntades”.

Lo mismo ocurre con el poder de las armas; las municiones siempre son limitadas y se terminan por acabar, en cambio la fe en el prójimo y la confianza que genera un empresario optimista y humilde, permanecen grabadas en la memoria y el espíritu de la gente.

Hacia el exterior de su empresa, el optimismo, el ser positivo y la humildad, siempre ayudan a generar y construir buenas relaciones con los clientes, cuyo fundamento no es el miedo, no es el temor a la autoridad, sino el respeto y la vulnerabilidad. Si, ser vulnerable nos hace humanos, envilecerse con el poder, te hace despreciable.

Si usted logra una relación sana con sus clientes, basada en la credibilidad de sus acciones como persona honesta, positiva y humilde, Usted tendrá un cliente fidelizado de por vida. Y esto nos lleva al siguiente valor transcendental para tu negocio: las referencias.

Éstas vienen como consecuencia de hacer un buen trabajo, no solo que su producto sea bueno, excelente y de óptima calidad y al mejor precio, sino, que su reputación como buena persona acompañe a aquel como valor intangible. La gente creerá en su producto tanto como en Usted mismo. La fama le precederá.

Esa fama le acompañará en su aventura empresarial, dejando sus rastros a través de las Redes Sociales. Si, hoy en día, el poder de las Redes Sociales en justamente que el cliente valora directa y públicamente su nivel de satisfacción. Su trato personal es parte del sello de su marca. Y Google no oculta nada: todas sus acciones le perseguirán, es el Karma que genere en su devenir empresarial lo que hará de usted un éxito positivo. Si aprovecha la oportunidad para dar consejos y recomendaciones, y mostrar su mejor intención, catapultará su efecto positivo.

El éxito y el progreso depende de nuestras acciones
El éxito en la vida, está determinado por los hábitos que diariamente practicas Foto: Pixabay

Vender su producción, colocar en el mercado sus productos y/o servicios requiere de un proceso consecutivo de decisiones completamente retadoras, no solo debe dirigirse al consumidor o cliente, sino muchas veces esa acciones requieren que convenza a su propio equipo de trabajo, y a veces hasta a sus accionistas o directores en la empresa.

En ese proceso de comunicación para la acción, la humildad y el espíritu positivo que impregna esas acciones, cala directamente en el ánimo de quienes le conocen, esto os lleva a evaluar un gran peligro, quizás su enemigo mas temible: su propio Ego.

El Ego es su enemigo. Si usted proyecta que es usted lo más de lo más, no solo se alejará de la humildad y la influencia positiva, sino, que al final del día, espantará a todo el que se cruce en su camino. La falta de confianza y la falta de confianza y la inseguridad espantan, pero la sobredosis de confianza y un ego inflado, son mucho mas efectivas para ello. La Soberbia no es grata.

La humidad, la generosidad y el espíritu positivo operan como imanes para atraer clientes y fidelizarlos. También con su personal funciona, la gente no quiere irse de una empresa en la que siente que su aporte es valorado, y además recibe refuerzos positivos.

Nuestro cerebro, según la ciencia puede configurarse para ser positivos. Para ser optimistas. redefinir nuestro comportamiento y enseñar con el ejemplo que la felicidad radica en la humildad, y no en la soberbia, es el acto más noble que todo empresario puede inculcar a quienes le siguen: el Liderazgo por admiración, y no por temor, esa es, en esencia, la psicología del éxito.

*Sobre Rogelio Queijeiro Taboada

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