Elecciones, ¿ir o no ir?
Nicolás Maduro ofreció, como una panacea, la celebración este año de las ya vencidas elecciones de gobernadores.
El tema se convierte casi en una de las tragedias de Shakespeare, Hamlet, ser o no ser.
Si, como señalan Smartmatic, el antiguo ministro de información de Chávez, Andres Izarra, la MUD, La Asamblea Nacional, el rector del CNE, Luis Emilio Rondon, más de 40 naciones y otras personalidades, el proceso del domingo estuvo viciado de nulidad por presuntas irregularidades en cuanto al monto efectivo de personas que sufragaron, resulta cuesta arriba participar en una elección con un CNE cuestionado.
Por otro lado, hay partidos políticos de oposición que manifiestan su deseo de participar con el argumento de que no se debe dejar espacios libres en procesos electorales, ya que eso sería entregar, sin luchar, el control de todas las gobernaciones del país al oficialismo.
No nos corresponde a nosotros decidir cuál es el camino a seguir, sin embargo, pareciera ilógico que después de cuatro meses de manifestaciones pacíficas y la realización exitosa de una consulta popular el 16 de julio, no se someta a un proceso de evaluación lo más amplio posible cuál es la vía que la inmensa mayoría de la población considera más conveniente y si se debe, o no , en las actuales circunstancias políticas del país ir a unas elecciones regionales.
La situación hoy es cada día más confusa e incierta y no se sabe si este viernes se instalará o no la constituyente y tampoco cuáles podrían ser, de instalarse, las medidas que adoptaría con relación, entre otras, a los poderes constituidos, es decir la Asamblea Nacional y la Fiscalía General de la República.
Esta decisión no puede tomarse a la ligera sin saber en qué condiciones estará el país en los próximos días, y podría ser precipitada sino es producto de un gran consenso nacional.