La negociación
La negociación es a la vez un arte y una ciencia. Es lo contrario a la improvisación y al oportunismo.
A la negociación se llega por diferentes causas, o bien por estar derrotado o por estar consciente de que no se puede ganar con el enfrentamiento.
Negociaciones producto de una derrota son, por lo general, negativas a largo plazo, ejemplo clásico: la paz de Versalles, que produjo a término el surgimiento del fascismo y la II guerra mundial.
Las negociaciones que surgen cuando las partes constatan que no pueden ganar son las más comunes, como las que acabaron con las guerras en Centroamérica.
En nuestro país la negociación se convirtió en chacota con el fallido proceso de diálogo porque el gobierno creía, erradamente, que podría vencer si ganaba tiempo.
Hoy las circunstancias lucen muy diferentes, la oposición no sólo no está vencida sino que viene en ascenso y el gobierno va perdiendo aceleradamente terreno político.
La presión internacional promueve y propicia negociaciones para solucionar el impasse y la crisis de gobernabilidad que cada día se acentúa.
¿Qué sucederá? ¿ prevalecerá la locura? o se impondrá la racionalidad, estos días serán clave.