Opinión Internacional

AMLO, la radicalización de la izquierda

Andres Manuel López Obrador, en 2009 sigue siendo una figura política, líder de un movimiento que ha venido resistiendo, pero también que ha venido a menos, el ex candidato a la presidencia continúa por la misma ruta, errónea desde mi punto de vista, persiste con un discurso beligerante, discurso que recurre permanentemente al encono social y al menosprecio por las instituciones, que buenas o malas, han costado mucho a la historia de México.

Ante las nuevas elecciones del Partido de la Revolución Democrática (PRD), AMLO rompe contra su partido porque el candidato que trató de imponer, Alejandro Encinas, no se vio beneficiado con el voto de la militancia de ese partido, y ante la victoria de Jesús Ortega, decide hacerse a un lado y adoptar otra bandera política, la del Partido del Trabajo y Convergencia.

En estos días preelectorales, AMLO continúa en la misma postura ante la imposibilidad de aceptar resultados electorales, no solamente ataca los institutos electorales, al presidente, a su todavía partido PRD, ataca también a todo aquel que no piense como él, a todo aquel que no crea lo que él cree. Se queja del cerrazón y complot de los medios, pero en realidad sólo concede entrevistas a los medios y comunicadores que continúan alabándolo, pero que cada día son menos.

Ahora AMLO vuele al ataque ante fallo del tribunal electoral que revocó la candidatura de su colega Clara Brugada a la Delegación Iztapalapa, el ex candidato argumenta que “fue revocada por el poder de la mafia” a través del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

Es precisamente en estos momentos cuando más resuenan las palabras de Roger Bartra, quien en los tormentosos días del conflicto poselectoral de las elecciones presidenciales del 2006, publicó el ensayo “La convención del cacique” (Letras Libres, septiembre 2006), donde afirmó que “el tremendo escándalo organizado por López Obrador no ha tenido razón de ser, y la izquierda se enfrentará tarde o temprano a la difícil tarea de reparar los destrozos ocasionados por su cacique urbano populista”.

A tres años de distancia el antropólogo y sociólogo reafirma en su nuevo libro La fractura mexicana que, a partir de aquel momento, “se agudizó en la izquierda mexicana un lento proceso de sustitución de las ideas por las pasiones. Surgieron las rabietas irracionales, las envidias venenosas, los odios contra los adversarios, que son vistos como enemigos.”
Bartra puntualiza que la “derecha” y, desde luego, el PRI, se han servido del rechazo automático del tabasqueño y los suyos a la negociación y el acuerdo. Y concluye que si la izquierda no es capaz de transformarse en una fuerza que “acepte abiertamente pactos y coaliciones con la derecha democrática (…) y al mismo tiempo impulse una cultura laica, moderna y civil, me parece que se verá amenazada por la extinción”.

La transformación de la izquierda no sólo se ve lejana, si no que cada vez deja de actuar con esa ideología, practica el caciquismo, el acarreo y continúa con una actitud de rechazo y odio a todo lo que venga del gobierno, predica con lo que tanto se quejaba del PRI y que tanto le reclama en la actualidad a la derecha.

Es innegable que AMLO constituye para muchos un líder moral que canaliza las injusticias e incongruencias del sistema político mexicano, pero también es cierto que este líder se ha constituido en lo que Bartra definió como un “cacique”, que tiende a no soportar la crítica y sigue aprisionado en el “fraude” fraguado por la “mafia del país”, sin poder escuchar y enfrascado en discursos llenos de incongruencia e intolerancia.

Si Lopez Obrador canalizara su fuerza política, su gran arrastre nacional en una oposición seria, que criticara con ideas y propuestas al gobierno de Felipe Calderón, si se alejara de los vicios que arrastra desde su militancia priista y dejara a un lado el discurso beligerante e iracundo, la política de choque; entonces tal vez podríamos tener una izquierda progresista que se constituyera en una opción viable y prudente para el futuro del país, pero mientras se continúe de la misma manera seguiremos teniendo una izquierda de caricatura, un líder de caricatura.

Fundado hace 28 años, Analitica.com es el primer medio digital creado en Venezuela. Tu aporte voluntario es fundamental para que continuemos creciendo e informando. ¡Contamos contigo!
Contribuir

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Te puede interesar
Cerrar
Botón volver arriba