Bandera Nacional
(%=Image(6065724,»L»)%)Es el símbolo de los tiempos, del sentido de pertenencia, la independencia y autodeterminación. Es el sueño nacional, la compaginación de las ideas.
Expresión de la libertad ante nosotros mismos como gente de una tierra y es también la representación ante el mundo de un espacio nacional.
El tricolor patrio ondeando a más no poder con la fuerte brisa de una mañana cualquiera, impactada por el amarillo sol y el cielo azul es la grandeza histórica, los colores primarios, la relación intensa, el vinculo sanguíneo que a todos nos une.
El contenido que le acompaña, su verdadero significado, radica en la profundidad del ser y hacer de una nación, es la vida misma con todos sus componentes. Abarca cada espacio del territorio sin distinción, en ella no hay diferencias, se es uno con la totalidad.
La bandera está por encima de ideologías, es la representación nacional, no es de unos y otros. Es del país y su gente.
Ver entonces la bandera, utilizada como “representación “ de uno u otro sector, choca con su verdadero significado global, integrador, incluyente y de hermandad.
La bandera es de todos y merece respeto su utilización. Ver el asta para ondearla golpeando carros, utilizada como lanza para agredir a otros nacionales, no es propio y tampoco se compagina con el criterio de su utilización.
También percibimos que su verdadero contenido se ha disminuido ante un intenso ofrecimiento de la moda pasajera y de la mercancía rentable. En muchos casos en nuestras calles, parece mas un objeto temporal para la venta en el discurrir cotidiano que la síntesis de una real comprensión de la profundidad cultural que la acompaña.
El quehacer ciudadano con todo su significado es uno de los estandartes fundamentales de nuestro tricolor nacional. Simboliza así el respeto profundo por la vida en toda su expresión natural y humana sin excepción y ese sentido es el que debe acompañar su utilización. Ese respeto abarca al individuo en lo personal, familiar, social, cultural, ambiental y espiritual.
A fin de cuentas el país seguirá siendo el país con cada uno de sus habitantes. Es solo cuestión de tiempo y paciencia para que este afán insensato termine de pasar.
Siempre “El Turpial seguirá cantando”, “ El Araguaney floreará” , “La orquídea embellecerá” y “La Bandera para todos por igual Ondeara”.
Un gran saludo a la vida
