¿Es posible la reconciliación en Venezuela? ¿Hay un camino a la paz?
Pues bien, en 1972, Nixon y Kissinger reabrieron relaciones con La China de Mao tse Tung, y todo comenzó por un torneo de pimpón entre chinos y norteamericanos. Por otra parte, recordemos la película «Invictus», que narra magistralmente como Mandela reconcilió a los surafricanos mediante el juego del rugby. Mandela era ya presidente cuando usó la política de reconciliación a través del rugby. No olvidemos que Mandela había estado preso por 27 años.
Claro: esta política de Mandela fue hecha con inclusión, no de manera sectaria. El rugby era herencia de los ingleses y era jugado por los blancos. El acierto de Mandela fue que logró que los negros se interesaran también en el rugby y que no fuera un deporte exclusivo de los blancos. Para ello Mandela armó un tremendo equipo y puso una extraordinaria dosis de energía por parte de su gobierno en el campeonato mundial de Rugby que se celebró en Sudáfrica; evento que los surafricanos ganaron y que a la vez ayudó en su proceso de reconciliación (en Suráfrica tuvieron unos odios y unas divisiones internas mucho peor que las que hoy tenemos en Venezuela).
Hay una escena en la película que explica muy bien lo que queremos decir: recién instalado Mandela en la presidencia nombra su equipo de seguridad, el jefe de la escolta era un negro. Además, Mandela nombró a varios otros negros en su escolta. Pues bien, al poco tiempo llegan varios blancos a la oficina de seguridad con la correspondiente orden de Mandela para ser incorporados a dicha oficina.
Luego que el jefe de la escolta lee aquello se queda estupefacto e inmediatamente sale como un cohete a la oficina de Mandela y le pregunta si era verdad lo que sucedía.
Ante la respuesta afirmativa de Mandela, el jefe de los guarda-espaldas le pregunta a Mandela que si sabía que esos señores habían atentado contra la vida de ellos mismos; Mandela le responde que sí, pero que a la vez para reconciliar a los surafricanos no les quedaba otra que perdonar (y también para unificarlos).
Al jefe de seguridad no le quedó otra que aceptar a regañadientes. Si bien el jefe de seguridad era negro, el resto de los funcionarios eran blancos y negros; y poco a poco los escoltas blancos le fueron explicando a los escoltas negros cómo era el rugby (los escoltas negros no entendían del rugby ya que anteriormente solo lo habían jugado los blancos).
Y fue a través de una política integrista en el campo del rugby como Mandela reconcilió a blancos y negros, y además los integró como nación. Además, creemos que el hecho que en el año 2010 se hubiera jugado el mundial de futbol en Suráfrica tuvo que también haber ayudado a fortalecer la reconciliación debido a haberse realizado el pasado mundial de fútbol en dicho país.
El domingo tuvimos el triunfo de Pastor Maldonado en la Fórmula 1. Es la primera vez que un venezolano llega a un pódium y sobre todo: en el primer lugar. Es la primera vez que escuchamos las gloriosas notas del Himno Nacional y que vemos izar nuestra Bandera en la Fórmula 1.
Decimos esto porque en este momento estamos en una encrucijada muy similar a la que estaba Mandela cuando comenzó su gobierno. Hay que observar que Mandela no llegó al gobierno pasando facturas, haciendo cacerías de brujas y ordenando razias y venganzas. Si bien por una parte en torno a Pastor Maldonado vimos reconocimiento a su labor deportiva; por la otra, vimos ciertos intentos de futuros pases de facturas en contra de Pastor Maldonado porque se había cuadrado 100 % con el régimen de Chávez ya que no estaría corriendo en la Fórmula 1 si PDVSA no lo hubiera financiado; etc.
Es muy probable que pronto en Venezuela venga un cambio de gobierno. Tenemos 2 caminos: o crucificamos a gente que se cuadró totalmente con el régimen de Chávez tales como José Antonio Abreu, Dudamel y Pastor Maldonado; o como antes describimos: hacemos lo que hizo Mandela, y buscamos la integración de todos los venezolanos, a través de valores humanos como José Antonio Abreu, Dudamel y Pastor Maldonado; y en consecuencia, nos metemos en el camino de la paz como metió Mandela a Suráfrica.
Me inclino por la segunda vía; nada vamos a ganar crucificando a extraordinarios valores humanos tales como José Antonio Abreu, Dudamel y Pastor Maldonado; más bien, lo que haríamos sería hacernos daño y perder-perder; todo por satisfacer nuestros instintos de venganza.
Lo que sí tendríamos que hacer es no volver a hacer lo que hizo Chávez, que se agarró para él y los “rojos-rojitos”, a José Antonio Abreu, Dudamel y Pastor Maldonado (diríamos más bien que los secuestró).
Lo que tenemos que hacer es liberar del secuestro político a extraordinarios valores humanos tales como José Antonio Abreu, Dudamel y Pastor Maldonado; y que de verdad sean como dice el canal 8: “de todos” (el actual canal 8 dice que “es de todos los venezolanos”, pero eso es solo un decir, en la práctica no es así).
Creo que la única salida que tenemos en Venezuela es lo que hizo Mandela es Suráfrica; si no, creo que nos expondríamos a una horrible confrontación fratricida entre venezolanos, cuestión que no deseamos nadie.
