Familiares de estudiantes de la UPEL deberán aguardar 45 días para verlos
Los familiares no podrán ver a sus hijos hasta que se efectúe la audiencia preliminar. Mucho ha pasado desde que Tamara López, madre del upelista Richar Suárez, tuvo contacto directo con su hijo por última vez. El encuentro se realizó en la cárcel de El Dorado.
De acuerdo al testimonio de la madre, las visitas serán permitidas en 45 días; así lo reza el reglamento para nuevos ingresos en el Centro de Formación del Hombre Nuevo Libertador, situado en Tocuyito, estado Carabobo. Pero este margen rebasaría la fecha de la audiencia preliminar de los jóvenes, pautada para el próximo martes 26 de septiembre. Las esperanzas de verse de nuevo se anclan en ese breve encuentro.
Para la declarante, el traslado es un indicio de una posible liberación de los universitarios luego de que la Fiscalía Militar recomendara el sobreseimiento de la causa para 22 de los 27 estudiantes Upelistas.
Nuevo reclusorio, nuevas reglas. En el anexo nuevo de Tocuyito los días destinados para recibir visitas son los sábados y domingos. Los martes sirven para recibir aportes, enseres y alimentos de los familiares.
El traslado se efectuó bajo el velo nocturno. Los 11 estudiantes de la Universidad Experimental Pedagógica Libertador (UPEL) de Maracay, quienes permanecían reclusos en la cárcel de El Dorado en Bolívar, habrían arribado al rededor de las 10:00 p.m. La caravana partió a las 5 de la mañana.
Los jóvenes fueron observados a la distancia por López, quien permaneció a las afueras del penal con la esperanza de ver llegar a su hijo.
Un mal cálculo del tiempo de viaje la hizo llegar cerca de las 11 de la noche. «Yo los vi cuando estaban ingresando, iban vestidos de amarillo. Les llevaba comida y agua porque pensaba que podrían necesitarlo pero uno de los custodios me dijo que allí serían bien tratados», refrendó.
16 privados de libertad del fueron trasladados de la cárcel de El Dorado hasta el nuevo anexo de Tocuyito. Si se pormenoriza la cifra se descubre que 11 de los reclusos eran los estudiantes de la UPEL, quienes viajaron junto a 5 sujetos detenidos por saqueos, precisaron fuentes cercanas al recinto penitenciario.
Pese al hermetismo, se pudo constatar que los jóvenes ya se encuentran instalados en sus celdas. Sin formas de comunicarse directamente con sus familiares, queda la duda sobre su estado físico. Al menos 4 de los jóvenes fueron diagnosticados con paludismo mientras seguían privados de libertad en la cárcel oriental de El Dorado.
