Vida con estilo

Luis Davis: Con determinación logré trabajar en el paraíso que siempre soñé

Daniel Murolo – Miranda.-
@dmurolo

Luis Davis siempre lo tuvo claro. Desde bien «chamo» soñaba con trabajar en un sitio paradisiaco, esos que se ven en las películas, en una montaña, cerca del intenso azul del Caribe o en un viñedo en Italia. “Con mucha determinación se logran la cosas”, sentencia con una sonrisa de satisfacción, tras lograr su objetivo: trabajar en una de las posadas más exclusivas de Choroní desde hace 10 meses.

Rodeado de las verdes cumbres del Parque Nacional Henry Pittier, bordeado por las cristalinas y ruidosas aguas del famoso río que atraviesa la zona y a pocos metros de la playa, Cacaoni Lodge es lo más cercano al paraíso en tierras venezolanas.

La historia de cómo logró su sueño es divertida e inspiradora. Luis Davis González Urquía trabajaba hace menos de un año en un restaurante en la ciudad de Maracay como cocinero, en su faena diaria, rodeado de ollas, verduras, carnes y lavaplatos, conoce a Andreina, una chica que había trabajado una temporada en la referida posada de la costa.

«En ocasiones hablamos que queríamos trabajar en lugares remotos, queríamos laborar en sitios como la playa, la montaña e incluso en Europa, en eso ella me comenta que ya había trabajo en la playa así que podía tachar eso de su lista de cosas que quería hacer», recuerda entre risas.

Al enterarse de los detalles del lugar en el que había estado su amiga, Luis comienza a investigar todo sobre el sitio, «ella me explicó todo aquel rollo, me dijo que solo contrataban por temporada, lo que hizo que mi entusiasmo disminuyera, pues necesitaba un trabajo estable».

Sin embargo, el joven de 21 años no desistió de la idea e investigó sobre Cacaoni, “lo que hacían, quienes eran, hasta el punto tal que ya era una obsesión, mi meta era trabajar con ellos (…) contacté a una chica llamada Gabriela de Campos, cuyo papa era mi profesor de bombonería y no lo sabía, por medio de ella logré tener un fin de semana de trabajo (destajo, nada seguro), pero es aquí donde se complica todo”.

Narra que un viernes por la tarde se encontraba arreglando el almacén de insumos del restaurante laboraba cuando recibió una llamada, “cuando contesto, me encuentro con la sorpresa de que quien me estaba hablando era el chef de la posada Cacaoni Lodge, preguntándome cual era mi disposición en ese momento porque ellos necesitaban alguien de apoyo”.

Le piden que se presente el sábado al medio día para que trabajara el fin de semana, “le dije que sí, la cuestión era como hacía con mi trabajo de ese momento, ¿lo dejaba? ¿pedía permiso? ¿qué hacía? No lo pensé mucho y al siguiente día agarre un autobús para Choroni”.

“Aposté a ganar y gané, puse mucha determinación en lo que quería y ya llevó diez meses acá”, sentencia. En la actualidad es el ayudante de cocina fijo de Cacaoni, lo que lo obligó a congelar, por ahora, sus formación en el Centro de Estudios Gastronómicos de Aragua (CEGAR); “mudarme a Choroní no fue un problema puesto que aquí -la posada- nos brinda hospedaje, comida, lavandería, y un punto a mi favor es el lugar en donde me encuentro, rodeado de playa, montaña, soy fanático de la naturaleza”.

Un paseo por el Instagram de Luis (@luisurquiadavis) deja en evidencia no sólo su pasión por la naturaleza, la gastronomía, sino también de la fotografía la cual practica a menudo con los turistas que visitan el paradisiaco pueblo aragüeño.

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