Alvaro Uribe se inscribe para la reelección
El presidente Alvaro Uribe formalizó ayer su candidatura para un segundo mandato, y lo hace en medio de acciones de las FARC en amplias zonas del país que golpean el esquema de seguridad que el gobernante erigió como uno de los pilares de su administración.
Con la cruz marcada con ceniza en la frente con motivo de la celebración católica del Miércoles de Ceniza, el mandatario firmó en la Registraduría Nacional la ficha que lo acredita como candidato por el movimiento independiente de ciudadanos Primero Colombia. Lo hizo acompañado de su esposa Lina, el vicepresidente Francisco Santos y su más cercanos colaboradores.
»Pedimos a Dios que nos ayude para que esto sea útil a Colombia», expresó Uribe a periodistas tras la breve ceremonia.
Después, en un hecho inédito en más de un siglo en Colombia, el presidente y candidato participó en su primer acto de campaña interviniendo en una asamblea nacional del partido Conservador, uno de los partidos que lo respaldan y se cobijan bajo su popularidad para promocionarse. Uribe enfocó su mensaje alrededor de la complicada situación de orden público que atraviesan al menos ocho departamentos del país en donde las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) impusieron »paros armados» que restringen el tránsito con amenaza de atacar o incendiar.
Además, las FARC mataron 18 civiles en dos ataques separados el sábado y el lunes.
»Esta arremetida (de las FARC) en contra de la democracia … es para tratar de desviar la atención de los colombianos para pretender crear la falsa idea de que la política de seguridad democrática no ha sido eficaz», expresó Uribe.
En respuesta al asedio rebelde, Uribe ordenó que «las oficinas de la fuerza pública queden solas, atendidas por el personal administrativo y que todos los policías y soldados de todos los rangos estén en las calles y los campos de Colombia para enfrentar esta arremetida del terrorismo».
Diferentes encuestas colocan a Uribe como el candidato con más oportunidades de ganar la elección presidencial del 28 de mayo con una intención de voto por encima del 52 por ciento, mientras que su más cercano contendiente sería el designado por el partido Liberal –aún por definirse–, que tendría el 15 por ciento.
El Presidente esgrime la misma fórmula que le dio el triunfó en la campaña anterior, ofreciendo mano dura para combatir a las guerrillas.
»La política de paz puede tener dos caminos: un camino de apaciguamiento, de arrodillamiento, de entregarle el país a los genocidas de las FARC… (u) otro camino, el camino serio de la seguridad democrática», expuso.
El presidente del partido Conservador, Carlos Holguín, manifestó que «en los últimos cuatro años a su lado, presidente Uribe, los colombianos se sienten hoy con renovada confianza… y comprometidos en hacer futuro».
