Emilio Figueredo: suspensión de medida contra embajadora de la UE muestra el desespero de Miraflores
El frenazo que constituye la decisión tomada por la gestión de Nicolás Maduro de suspender la medida de expulsión de la embajadora de la Unión Europea (UE) en Venezuela, Isabel Brilhante Pedrosa, puede interpretarse como una muestra del desespero y la preocupación que invade a Miraflores por la posible extradición a Estados Unidos de Alex Saab, señalado de ser presunto testaferro de Maduro.
Así lo consideró el especialista en Derecho Internacional y presidente editor de Analítica, Emilio Figueredo, quien aseveró que la orden original de Maduro, que daba 72 horas para que la jefa de la Delegación de la UE abandonara Venezuela, fue un error más de un cúmulo de fallos que viene dando el oficialismo en las últimas semanas.
Para Figueredo, uno de ellos fue la declaración del canciller oficialista, Jorge Arreaza, quien apuntó que el colombiano Alex Saab, detenido en Cabo Verde, gozaba de pasaporte diplomático, por lo cual no podía ser apresado, así como su intención de trasladarse al archipiélago africano para atender personalmente el caso, viaje que no fue autorizado.
Asimismo, otro desacierto lo representa la «acelerada e ilegal» designación por parte del Tribunal Supremo de Justicia gubernamental de un nuevo Consejo Nacional Electoral, al que se añade, según el presidente editor de Analítica, la decisión del ente electoral de aumentar a 277 el número de diputados a elegir para la Asamblea Nacional.
Cero chantajes
Y a partir de ahora, ¿qué hará la Unión Europea? El panorama, de acuerdo con la perspectiva de Emilio Figueredo no variará, ya que el grupo de los Veintisiete mantendrá la presión contra la Administración de Nicolás Maduro, en su objetivo de restablecer el orden democrático en Venezuela.
En este sentido, rechazó que la medida de dejar sin efecto la decisión de expulsar a Brilhante Pedrosa, tenga algo ver con alguna negociación entre las partes, afirmando que la UE «no se prestará a ningún tipo de chantaje», promovido desde Miraflores.
UE: actor principal
Lo cierto es que la Unión Europea ha sido en lo que va de 2020 un bastión relevante en lo que respecta a la donación de fondos para apoyar diversos programas humanitarios en favor de los sectores más vulnerables en Venezuela.
La entidad con sede en Bruselas, Bélgica, ha aportado en el presente año más de 60 millones de dólares para beneficio de los venezolanos en situación crítica, aportes que ha sido canalizados a través de organismos de Naciones Unidas, así como diversas ONG’s y el sector privado.
Del mismo modo, notable fue también el impulso brindado por la Unión Europea a la Conferencia de Donantes que se llevó a cabo de manera virtual el pasado 26 de mayo y que recaudó más de 2.700 millones de dólares en ayudas para los migrantes y refugiados venezolanos que sobreviven en Latinoamérica, especialmente afectados por los efectos derivados de la pandemia del coronavirus.
