Informe revela nexos de gobierno de Maduro con grupo terrorista Hezbollah e Irán
«Hezbollah ha ayudado al régimen de Nicolás Maduro a convertirse en el eje central para la convergencia del crimen organizado transnacional y el terrorismo internacional en el hemisferio occidental«. Esta es una de las conclusiones emanadas en un informe elaborado por el centro de pensamiento estadounidense Atlantic Council, que revela los lazos entre la República Islámica de Irán y la organización terrorista con el grupo que despacha desde Miraflores.
La investigación del think tank con sede en Washington destaca cómo se han constituido las relaciones entre el grupo terrorista libanés y el Ejecutivo presidido por Maduro. «El régimen venezolano proporcionó identidades duales a algunos habitantes de Oriente Medio, construyendo una red clandestina que proporciona inteligencia, entrenamiento, fondos, armas, suministros y conocimientos técnicos tanto a Venezuela como al régimen de Assad» en Siria.
Modelo de inserción
«Hezbollah tiene un modelo multifacético y multidimensional. Tienen actividades legítimas como un partido político y medios de comunicación, que mezclan con actividades ilícitas, incluyendo el tráfico de drogas y el lavado de dinero«, dijo el autor del informe, Joseph Humire, director ejecutivo del Centro para una Sociedad Libre y Segura.
En este sentido, la investigación detalla que tres clanes de familias libanesas y sirias vinculadas a Hezbollah son parte fundamental de la economía «ilícita» con base en el narcotráfico, lavado de dinero y el contrabando propiciados por la gestión de Nicolás Maduro.
Según apunta Humire, la base logística que brindan estos clanes permite que Maduro y sus grupos criminales asociados, como las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), «expandan sus operaciones» en nuestro país. «Maduro brinda protección de movimiento a los integrantes de esas redes criminales«, afirmó.
El informe de Atlantic Council menciona a estas familias, que identifica como el Clan Saleh, el Clan Nassereddine y el Clan Rada, que opera con células en Maicao, Maracaibo y Valencia.
Irán en el medio
Por otro lado, Humire alerta que el puente aéreo y marítimo establecido entre Irán y Venezuela en medio de la pandemia de coronavirus es un apoyo logístico de comida y combustible, que serviría de «cobertura» para otras actividades ilícitas en las que estarían involucrados los tres clanes mencionados.
«Ese puente replica lo que Irán ha hecho en Siria«, sentencia Humire, en referencia al respaldo del gobierno iraní y de Hezbollah al presidente sirio, Bashar al-Assad.
Interés mutuo
Sobre estas estrechas relaciones, Kirsten Fontenrose, directora de Seguridad Regional de la división de Oriente Medio del Atlantic Council, manifestó que la injerencia iraní en Venezuela «es peligrosa desde el punto de vista de la financiación del terrorismo, no desde el punto de vista del reclutamiento de terroristas«.
Asimismo, apuntó que ese vínculo no se debe a cuestiones ideológicas, sino por el mero interés de ambas partes que están bajo fuertes sanciones internacionales: «La mayor preocupación es que Irán utilice a Venezuela como una fuente de financiación«, dijo Fontenrose.
Finalmente, Humire subrayó la importancia de que los países designen a Hezbollah como un grupo terrorista: «hacerlo crea un lenguaje común entre la comunidad internacional, mitigando los vacíos políticos y la confusión que el régimen de Maduro y la organiación terrorista han explotado para convertir a Venezuela en un centro de convergencia del crimen organizado transnacional y el terrorismo internacional«.
