Oriente Próximo, la región con mayor aumento migratorio de la última década
Entre 2005 y 2015, Oriente Próximo pasó de tener 25 millones de inmigrantes a 54 millones, un aumento de 116% que lo convirtió en la región con mayor incremento migratorio del mundo, según un estudio revelado este miércoles por el Pew Research Center.
Al Oriente Próximo le siguieron África (91%), América Latina y el Caribe (77%), la región Asia-Pacífico (26%) y finalmente Europa y Estados Unidos con cerca del 20%.
Este incremento en Oriente Próximo provocó que los migrantes pasaran de representar el 7% de la población en 2005 al 13% en 2015, de acuerdo con datos de Naciones Unidas recopilados por el Pew, que tiene sede en Washington.
Por migrantes, el Pew se refiere a desplazados por conflicto armado dentro de las propias fronteras o a otras naciones de la región y a inmigrantes económicos a otros países.
Según el Pew, el 60% de los 29 millones de nuevos migrantes documentados durante el periodo en cuestión (2005-2015) fueron consecuencia de conflictos armados y afectaron particularmente a Siria, Irak y Yemen. El primer país es el que tiene más desplazados internos de la región con 7,1 millones. Le sigue Irak (4,7 millones), Jordania (2,9 millones) y Yemen y Turquía con 2,8 millones.
Los desplazados representan el 41% de la población en Jordania, el 40% en Siria y el 34% en el Líbano. «La mayoría de población desplazada nunca cruza las fronteras», constató el Pew en su estudio.
El 40% restante, durante el periodo 2005-2015, fueron migrantes con motivaciones económicas y sus movimientos se concentraron en naciones petroleras del golfo Pérsico.
Los países con mayor número de inmigrantes económicos son Arabia Saudí con 10,2 millones, Emiratos Árabes Unidos con 8 millones y Kuwait con 2,9 millones.
Además, estos inmigrantes representan el 88% de la población en Emiratos Árabes Unidos, el 75% en Qatar y el 74% en Kuwait.
El balance 60% – 40% de la última década dista mucho del registrado con anterioridad al 2005, cuando los migrantes económicos representaban el 78 % de la región y los desplazados tan solo un 22 %, de acuerdo con el Pew.