AI: Desborde de la violencia es responsabilidad del Estado por la falta de sanciones
Amnistía Internacional dio a conocer un nuevo informe en el que pone en evidencia las fallas del Estado venezolano para garantizar el derecho a la vida y seguridad de todas las personas.
En el texto, presentado este jueves, y titulado «Esto no es vida» se refleja «la crisis social y humanitaria en el país liderado por Nicolás Maduro».
A través de Twitter, Amnistía Internacional enfatiza que «el Estado venezolano ha aplicado medidas represivas y ejecuciones extrajudiciales».
Acá algunas de las principales conclusiones presentadas:
El Estado venezolano es responsable «de la violación del derecho a la vida y la integridad personal de cientos de cientos de víctimas».
Las políticas represivas del Estado criminalizan socialmente la pobreza. La violencia en Venezuela se vive principalmente en zonas populares «con riesgo de exclusión social». Los mayores protagonistas son hombres entre los 15 y 44 años.
Los planes de seguridad entre el 2002 y el 2017 aplicaron métodos de represión para combatir el crimen como «allanamientos ilegales, ejecuciones extrajudiciales y torturas».
Venezuela es uno de los países más violentos del mundo: hay 89 homicidios por cada 100.000 habitantes (cifra de 2017). Desde 2002 el incremento en homicidios «ha ido en aumento constante».
Amnistía dice que ha podido identificar «actuaciones de agentes del Estado venezolano que les atribuyen la responsabilidad sobre las altísimas tasas de homicidios del país».
La impunidad en casos de homicidios alcanza niveles del 90%. Detalla que 8.292 presuntas ejecuciones extrajudiciales entre 2015 y junio de 2017. El 22% de los homicidios en 2016 fueron a manos de funcionarios de seguridad, equivalente a 4.667 homicidios.
El informe revela que Venezuela es el segundo país del mundo con mayor tasa de homicidios en 2017, después de Siria. De hecho, el 95% de las víctimas de homicidios en 2017 fueron hombres.
En efecto, el 60% de las víctimas de homicidios en 2017 tenían entre 12 y 29 años. Las víctimas: Jóvenes entre 16 y 29 años de edad, padres de niñas y niños pequeños, responsables del sustento del hogar, zonas populares (con altos índices de pobreza), mayoría con educación secundaria concluida, obreros.
La mayoría asesinados en sus hogares en presencia de sus familias. Las muertes ocurridas en marco de operativos de seguridad han sido por disparos al tórax, cabeza y cuello.
La situación de DDHH en Venezuela: 87% de las personas en Venezuela en situación de pobreza en 2017, el 61,2% de las personas en Venezuela en situación de pobreza extrema en 2017. Así, 2.600% de inflación hacia finales de 2017 (estimación, FMI) y en 1.000.000% sería la inflación estimada para finales de 2018 (FMI).
