Más de 4 mil venezolanos cruzan la frontera colombo-venezolana para almorzar
Más de 4 mil venezolanos realizan a diario una larga fila que se extiende por más de dos calles bajo un sol inclemente, donde esperan su turno para recibir en platos de distintos colores un almuerzo que contiene: arroz, lentejas, carne mechada y yuca, una porción generosa que comen con gusto y agradecimiento.
Cruzar a diario el puente Simón Bolívar y caminar menos de un kilómetro ya se ha convertido en una rutina diaria para los venezolanos, en su mayoría residenciados en San Antonio del Táchira.
A escasos metros de la frontera colombo-venezolana se ubica la Casa de Paso de la Divina Providencia, ubicada en una zona residencial de Villa del Rosario, municipio del área metropolitana de Cúcuta, donde la muchedumbre busca un plato de comida que en ocasiones es el único que comen al día.
La idea del comedor surgió cuando el sacerdote colombiano José David Cañas Pérez, de la Diócesis de Cúcuta, se interesó en ayudar a los venezolanos e inspirado en el mensaje papal creó el comedor en el año 2017.
El comedor cuenta con una entrada y una salida que conducen a calles diferentes y puede albergar al mismo tiempo a mil comensales, algunos llegan solos mientras que otros comen en familia.
A su iniciativa se sumó gente de Cúcuta interesada en aportar, una industria fuerte de la ciudad como lo es el gremio del calzado y el sector de las confecciones.
El año pasado se sumó el Programa Mundial de Alimentos (PMA), de la ONU, ayudando con mercados para preparar la comida y garantizar de esta manera que el menú varié diariamente.
Nelly Amparo García declaró que tardaba más de media hora en llegar al comedor desde su casa “Hoy nos dieron unas lentejas bien buenas; el comedor es muy bonito y dan muy buena atención; todo está limpiecito”, agradece el plato que recibe a diario y reconoce la escasez de alimentos y medicamentos en Venezuela.
