Conindustria: Problema de desabastecimiento es de origen estructural por el control de precios
El presidente de Conindustria, Eduardo Gómez Sigala, salió al paso a la propuesta de un pacto antiinflacionario que maneja el gobierno y la Asamblea Nacional para atacar la actual situación del país, al asegurar que la problemática parte del control del precios y las presiones que reciben los sectores económicos.
Gómez Sigala acotó además que no es la primera vez que en el país se intenta llevar adelante un pacto antiinflacionario, «esta no es la primera vez que vamos a ver estos planes antiinflacionarios. El problema está en la medida estructural, que es la medida de intervención y de controles de precios».
El dirigente de los industriales aseveró que mientras se mantiene la intervención y la regulación en los precios, se generan distorsiones, pues productos que «están regulados desde hace 2 años, con el mismo precio, teniendo el impacto inflacionario, es obvio que están teniendo la presión y el incremento de costos que no lo pueden trasladar».
Al considerar la propuesta gubernamental de un plan antiinflacionario, Eduardo Gómez Sigala acotó que «cuando se trata de un plan antiinflacionario en el cual se dice que va a subir la rentabilidad del ahorro en Venezuela, eso está muy bien, sin embargo no le quepa la menor duda, que en poco tiempo vendrá el incremento de la tasas pasivas, es decir, del costo del crédito».
Advirtió que tal situación haría que todos los venezolanos que se encuentran endeudados, les costaría mucho más pagar sus créditos, por lo que se observaría una disminución en los créditos o un aumento en la devolución de los bienes adquiridos.
Gómez Sigala al tocar el tema del desabastecimiento señaló que «la industria desde hace tiempo ha venido planteando que se revisen los precios, porque inclusive, durante todo el año pasado, los precios a nivel internacional, eran más elevados y el gobierno optaba por importar, por pagar esos precios más elevados, subsidiándolos en su cadena de comercialización».
Agregó que el año pasado se liquidaron unas 7 mil hectáreas de producción de caña de azúcar, por invasiones, y señaló que a pesar del anuncio de la entrada en funcionamiento de tres nuevas centrales azucareras por parte del gobierno, estas no han abierto sus puertas y se han convertido en centros de corrupción.
«La distorsión es no entender que en Venezuela, hay que estimular la producción, desde la caña de azúcar a la inversión de los centrales azucareros y que la oferta, la competencia es la que va a llevar a que los precios puedan bajar, mientras exista escasez vamos a tener distorsiones de precios», puntualizó.
