Docentes de Mérida le expresan al gobierno: «No somos locheros»
Por tercera semana los docentes del estado Mérida salieron a la calle a exigirle al gobierno nacional un ajuste salarial que propusieron a través de la Contratación Colectiva, la cual aún no firma el patrono y discute con las 17 federaciones de educadores que hay en el país.
Concentraciones, marcha y un gran trancazo, han sido las acciones gremiales que ha realizado el magisterio merideño, el cual este jueves se hizo sentir en la intersección Pie del Llano de la ciudad, con una protesta que colapsó el tráfico vehicular y además perturbó la normalidad de la urbe andina.
Humberto Atencio, secretario general de Sitraenseñanza, le dijo al gobierno que los educadores «no somos locheros ni peseteros» por lo que la protesta le exige al Ministerio de Educación, salarios dignos y justos.
«Protestamos contra el salario pírrico que tienen los docentes, el Ministerio, que hizo una contraoferta en el marco del Contrato Colectivo, al eliminar el porcentaje de ajuste salarial del 120% que pedimos y ofertar el 55%, está destruyendo el verdadero poder adquisitivo del maestro, porque la inflación para el año 2015 estaba en el 230% y nosotros cobrábamos todavía muy por debajo del salario mínimo», explicó Atencio.
El educador criticó que el Gobierno proponga eliminar los decimales de los montos a pagar, porque esa cantidad «queda en el bolsillo de alguien dentro del Ministerio de Educación».
En ese sentido, señaló que «tenemos la presunción de que hay un atraco a mano armada al magisterio y nosotros queremos un salario justo».
Atencio dijo que en Mérida hay cerca de 17 mil docentes, sin contar interinos y contratados y lamentó que un grueso número de maestros jubilados no ha sido homologado al salario mínimo.
Por su parte, el presidente del Colegio de Licenciados del estado Mérida, Nelson Pineda, aseguró que la tardanza en la firma del contrato colectivo se debe a que de 17 federaciones que están negociando con el Ministerio de Educación, 9 son afectas al gobierno y las otras 8 que son las que luchan por las mejoras salariales y las clausulas económicas ajustadas a la realidad del país, no han sido tomadas en cuenta.
«Por eso estamos en la calle, hay una protesta generalizada, no podemos permitir que el gobierno controle sindicatos y gremios con dádivas y con personas militantes del PSUV, que en lugar de beneficiar al magisterio, nos perjudican y no luchan por un salario justo para todos», apuntó Pineda, reseñó El Universal
