El Bus TV recibió premio Sophie Scholl por su compromiso cívico con la democracia

Anais López, representante de la red Unidas, resaltó que han transcurrido 80 años desde la ejecución de Scholl «y todavía miles de personas, activistas, periodistas y luchadores sociales se siguen contando entre las principales víctimas, a veces fatales, de los autoritarismos. Susana Raffalli, trabajadora humanitaria e integrante de Unidas, entregó a Castillo y a Singer 220 papelógrafos, «uno por cada emisora cerrada» en Venezuela

Pegan un papelógrafo en una pared, se los rompen y regresan con más. Informan cara a cara en comunidades populares. Ellas buscaron, y hallaron, una vía para sortear las dificultades de la información y la comunicación en la Venezuela del siglo XXI. El equipo de El Bus TV, proyecto periodístico para combatir la desinformación y contrarrestar la censura, fue reconocido con el premio Sophie Scholl que entrega la Embajada de Alemania en Venezuela con el acompañamiento de la red Unidas.

Laura Helena Castillo y Florantonia Singer, líderes del proyecto, recibieron el galardón de manos del jefe de misión de la Embajada de la República Federal de Alemania, Stefan Duppel. Los valores que reivindica el premio tienen que ver con el nombre de la persona que lo identifica, explicó Ruppel al recordar que Scholl formó parte del movimiento La Rosa Blanca que se opuso al régimen nacionalsocialista. La información independiente, subrayó, es un requisito para la democracia funcione; la única forma de garantizar la participación ciudadana en la toma de decisiones y de controlar el ejercicio del poder.

Anais López, representante de la red Unidas, resaltó que han transcurrido 80 años desde la ejecución de Scholl «y todavía miles de personas, activistas, periodistas y luchadores sociales se siguen contando entre las principales víctimas, a veces fatales, de los autoritarismos cuya existencia se alimenta de producir miedo, terror, silencio, pero también colaboración y complacencia».

Anais López recordó que El Bus TV nació en 2017 «en un momento difícil, de mucha represión, censura y autocensura en Venezuela». Sus herramientas incluyen un noticiero en el transporte público y el empleo de papelógrafos, entre otros. Es «un ejercicio de infociudadanía que ya es un precedente de cómo combatir la desinformación y la censura en contextos autoritarios apostando por el contacto con la gente»

Con información de contrapunto.com