Obispo Auxiliar de Mérida pidió participar el 15-Oct para rescatar derechos fundamentales
Nora Sánchez-Mérida
@norasan16
La feligresía merideña estuvo de júbilo este 29 de septiembre cuando Monseñor Luis Enrique Rojas Ruiz, conocido como el padre “Kike”, se ordenó como Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de Mérida.
La ceremonia de ordenación que colmó la Basílica Menor Catedral de Mérida estuvo enmarcada en la celebración de los 50 años de sacerdocio y 25 años de arzobispado del Cardenal Baltazar Porras, quien lo ungió del Santo Crisma y le entregó al nuevo obispo los símbolos episcopales como el anillo, la mitra y el báculo.
El prelado, quien no es indiferente a la realidad que vive el país y ante las elecciones regionales que se realizarán el 15 de octubre, expresó que no hay que temerle a los cambios y participar siempre “de la manera que se nos permita legalmente para rescatar los derechos fundamentales”.
Monseñor Rojas pidió al pueblo de Mérida y Venezuela, “salir a participar masivamente, vamos a hacerlo, estamos pidiendo justica, paz, democracia, amor, encuentro entre todos los venezolanos (…), si continuamos unidos en momentos de tanta división, podemos lograr objetivos importantes”, resaltó.
Su mejor elección
El Obispo Auxiliar de Mérida agradeció a Su Santidad el Papa Francisco por haberlo elegido obispo en un momento de tanta necesidad para Venezuela, por lo que resaltó que “quiero demostrar que ser sacerdote y obispo en momentos tan difíciles, fue mi mejor elección”.
Agradeció a todos quienes le han apoyado y colaborado y dedicó especiales palabras al Cardenal Baltazar Porras Cardozo de quien dijo marcó la pauta en momentos importantes de su vida desde que lo conoció en sus actividades sacerdotales y confesó que nunca imaginó que sería su Obispo Auxiliar.
La ordenación episcopal de Monseñor Luis Enrique Rojas Ruiz reunió en la Catedral de Mérida a cientos de feligreses y autoridades quienes lo acompañaron en tan emotiva ceremonia y la misma se realizó en el marco de la celebración de los 102 años del natalicio del Siervo de Dios y Arzobispo Emérito de Mérida, Miguel Antonio Salas.
Monseñor Rojas recordó que hace 25 años, exactamente un 29 de septiembre de 1992, llegó al seminario San Buenaventura “en la búsqueda realmente de lo que quería ser de mi vida”.
