Piden exhumar e identificar restos de las víctimas del Caracazo
El Comité de Familiares de las Víctimas (Cofavic) del Caracazo, informó que la corte Interamericana de los Derechos Humanos ordenó al Gobierno venezolano identificar a los responsables materiales e intelectuales, así como a eventuales encubridores del Caracazo. «A 28 años del suceso «no se conoce número definitivo de víctimas.y aun los restos de las fosas clandestinas de la Peste no han sido identificados plenamente».
Asimismo, los familiares de la víctimas que fueron asesinadas el 27 de febrero de 1989 exigieron que se exhume los restos, se investigue y se identifiquen a todos los cuerpos porque hasta la fecha «no se conoce número definitivo de víctimas y aun los restos de las fosas clandestinas de la Peste no han sido identificados plenamente».
En la sentencia la corte establece que el Estado venezolano «debe emprender investigación efectiva de los hechos, adoptar todas las providencias necesarias para evitar que vuelvan a repetirse los hechos, localizar, exhumar e identificar restos de 18 víctimas. Identificar restos inhumados (enterrados) en La Peste y entregarlos a sus familiares. Adoptar providencias para evitar que se repitan hechos como el Caracazo. Buscar medidas para formar en DDHH a cuerpos de seguridad, quienes también deben conocer límites, aun en Estados de Excepción».
Según Cofavic «el saldo de los fallecidos, lesionados y desaparecidos del Caracazo permanece bajo la indiferencia estatal, pero se mantiene en la memoria de los venezolanos. Nadie ha sido condenado por su participación directa o indirecta en los hechos violentos».
Detallaron que durante los primeros diez años de las investigaciones penales iniciadas por el Caracazo los familiares no tuvieron acceso a la información ya que se manejó en «carácter secreto», acción que rechazaron.
Hilda Páez, Yris Medina, Aura Liscano, Maritza Romero son algunas de los familiares de las víctimas de ese día y trabajan para que el país no olvide lo que sucedió. Denuncian que el «ocultamiento masivo de cadáveres en fosas comunes de la Peste, fue una de las más graves arbitrariedades del Estado» para ese entonces.
«Los que murieron en el Caracazo no eran unos perros”
Hilda Páez, tiene el peor recuerdo del Caracazo. A la 1:30 pm del viernes 3 de marzo de 1989 su hijo, Richard Páez, fue asesinado, la Policía Metropolitana disparó y un proyectil lo alcanzó.
Páez relató: “Sólo recuerdo que esa fue la noche más larga de mi vida. Yo corrí y me lancé al piso. Ni siquiera lo vi tirado porque yo decía que ese no podía ser mi hijo”.
Señaló que después se inició un proceso de lucha que aún no termina. “Sentíamos que teníamos que dar nuestra vida por la de nuestros hijos. Los que murieron en el Caracazo no eran unos perros”.
Subrayó que desde que comenzó esta lucha hace 28 años junto a los demás familiares, «han seguido violentando los Derechos Humanos, pero no dejamos de luchar».
