Gleyber Torres llegó a 100 jonrones con los Yanquis

Gleyber Torres está en medio del mejor inicio de temporada de su carrera y el lunes por la noche protagonizó un juego especial. El segunda base sacudió el jonrón 100 de su carrera y se embasó en cinco oportunidades, en el triunfo de los Yanquis 8-1 contra los Filis de Filadelfia, en Nueva York.

El centésimo cuadrangular del Caraqueño se produjo en el encuentro 580 en su trayectoria, lo que le convirtió en el séptimo yanqui que llega más rápido a esa cifra, sólo detrás de Gary Sánchez (355 juegos) y Aaron Judge (371), así como de los miembros del Salón de la Fama Joe DiMaggio (395), Lou Gehrig (514), Joe Gordon (528) y Mickey Mantle (576), según Elias Sports Bureau. Con información LVBP.com

“Se siente genial, increíble”, dijo Torres después del compromiso a MLB.com. “Es realmente especial, en particular hacerlo aquí en el Yankee Stadium. Es genial batear ese tipo de jonrón aquí”.

El importante estacazo de vuelta completa se produjo en el tercer inning, sin tráfico en las almohadillas, contra el derecho Taijuan Walker. El obús salió proyectado del bate del camarero a 101,2 millas por hora y recorrió una distancia de 361 pies hasta aterrizar en las gradas del jardín derecho.

A sus 26 años y 111 días de edad, Torres es el séptimo miembro de los Yanquis más joven con 100 bambinazos, apenas superado por Mantle (23 años, 242 días), DiMaggio (23, 273), Gehrig (24, 364), Joe Pepitone (25, 278), Don Mattingly (26, 68) y Bobby Murcer (26, 103), de acuerdo con Elias Sports Bureau.

“En 2020 y 2021, disminuí un poco mi producción, pero espero conseguir más de cien jonrones y tener una muy buena carrera”, apuntó Torres.

El infielder estableció un récord personal de bases alcanzadas en un desafío y empató su registro de tres boletos (también lo hizo 04/05/2021 vs. Houston; 24/06/2019 vs. Toronto, y 16/06/2019 en Chicago-LA). En el primer capítulo remolcó una rayita con sencillo y pisó el plato un par de veces, en tanto que se estafaba el segundo cojín en el quinto tramo.

“Me siento bien. Estoy tratando de ser un poco más paciente. A veces soy demasiado agresivo y empiezo a dar vueltas o poncharme mucho. Sé que los ponches son parte del juego, pero este año estoy tratando de no abanicar tanto. Estoy tratando de poner un poco más la pelota en juego”, agregó Torres, que terminó su gran noche de 2-2 para mejorar su línea ofensiva a .333/.529/.833 (12-4), con cinco anotadas, dos vuelacercas, cuatro impulsadas, cinco pasaportes y tres bases robadas. Estadísticas inéditas en sus primeros cuatro juegos para comenzar una campaña. De hecho, en 2022, su tercera estafa no se produjo antes de su compromiso 65.