Robinson Chirinos hundido en un bache ofensivo
La debilidad de los Astros de Houston es la receptoría. En las últimas temporadas el mánager A.J. Hinch no ha contado con una careta capaz de batear para promedio durante cada zafra.
Esta campaña se hicieron de los servicios de Robinson Chirinos, un receptor destacado por su desempeño detrás del plato, que sabe cómo llevar una buena comunicación con el lanzador y que maneja bien la zona de strike.
Dichos factores llevaron al alto mando del equipo astral a traer al venezolano durante la temporada muerta. Sin embargo, más allá de sumar 12 jonrones en lo que va de año, no ha podido chocar la bola consistentemente.
Chirinos, quien jugó hasta el 2018 con los Rangers de Texas, tan solo batea para .216 en 75 compromisos disputados.
De hecho, en los últimos 10 compromisos tiene average de .121 con tan solo una fletada.
“Su mecánica corporal está un poco desordenada”, dijo Hinch al Houston Chronicle. “Está haciendo el swing adelantado. Se nota lento al cargar y realizar la mecánica y eso es debido a su posición. Parte de eso viene a variar tanto las cosas y realizar muchos ajustes. Eso trae mucha desconfianza. Chirinos ha estado trabajando en las jaulas”.
No obstante, el capataz de la escuadra de Houston, valora la manera de cómo el criollo, de 35 años de edad, ha tomado cada turno.
“Me gusta la forma que toma los turnos al bate. Estoy seguro que saldrá de este slump”, argumentó el dirigente.
