Guía para sobrevivir a la Hiperinflación
Por Héctor Benavente – CEO de Kairos Consulting Group
Nos encontramos entrando al último trimestre del año 2018 y rumbo a cumplir 12 meses en hiperinflación. En este tiempo hemos podido ver varias etapas. La primera, durante los primeros meses del año, no se sentía tan grave, era lo mismo de antes pero algo más intenso. Luego el deterioro fue continuando y día a día, casi sin notarse, la calidad de vida fue bajando hasta que el presupuesto solamente ha alcanzado para cubrir las necesidades básicas.
Actualmente, estamos viviendo la fase dura de la hiperinflación, que se inició con el anuncio de las medidas económicas del Gobierno a mediados de agosto. Estas medidas, junto con las políticas de control a las empresas, nos ha llevado a una espiral en la cual la inflación se ha acelerado de forma importante. Las cifras de la hiperinflación casi ha duplicado su valor de un mes a otro, y hemos visto un deterioro muy acelerado de la calidad de vida de la gente, superior al vivido los meses anteriores.
Hasta agosto habíamos estado entrenando para el maratón y con las medidas impuestas por el Gobierno hemos empezado la verdadera carrera. Normalmente, esta fase aguda suele ser el principio del fin de la hiperinflación (así lo dice la historia, pero no hay certeza alguna). Lo que sí es seguro es que los próximos meses serán mucho más duros.
Por lo tanto, las empresas en Venezuela enfrentarán los siguientes problemas:
- Descapitalización de la empresa (por desconocimiento de costo de reposición)
- Caída de la rentabilidad
- Caída de la demanda
- Dificultades de acceso a materias primas y materiales
- Problemas a la hora de establecer precios
- Flujo de caja comprometido (en gran medida por la reforma fiscal)
- Pérdida y desmotivación del personal
- Controles de precio
- Incertidumbre
Ante este panorama, los empresarios deben pensar si su negocio está preparado para:
- Aumento del valor de la inflación, septiembre fue 235%, octubre puede superar este valor
- Pérdida de adquisitivo, aunque en la primera quincena de septiembre las personas pudieron sentir que lograban comprar más este efecto desaparecerá rápido y el deterioro será más fuerte que antes.
- Depresión de la demanda, con una pérdida de poder adquisitivo tan fuerte la demanda de muchos productos caerá de forma importante, esto a pesar de la cantidad de dinero que se inyecte al mercado vía aumento de salarios o bonos.
- Aumento de la escasez, sumando la caída de la demanda más los controles que se imponen desde el gobierno cabe esperar un aumento de la escasez y el resurgimiento, aún más fuerte, del bachaqueo (venta informal de productos) tal como se tuvo hace unos meses.
- Más BsS en la calle, vía aumentos salariales o bonos seguirá la inyección de dinero al mercado, esto sumado a la escasez de productos lleva al aumento del valor de la inflación que a su vez alimenta este ciclo y caemos en la espiral donde la situación empeora rápidamente.
- Mayor fuga de talento. Empleados cambiando de empresa por un mejor salario ya no es el principal problema, la diáspora se acelera lo que lleva a una pérdida de recursos , que no se logra evitar ni con aumentos de salario fuera de mercado.
- Dificultad para acceder a suministros, controles, caída de las importaciones, cierre de empresa, etc. Conseguir suministros o materia prima será aún más difícil en los meses por venir.
- Cierre de empresas, esto es consecuencia de todo lo anterior. Al cerrar empresas hay menos oferta, aumenta la inflación, y se repite el ciclo.
Al estudiar procesos parecidos en otros países, y en especial cuáles empresas lograron sobrevivir y qué hicieron, se puede notar que hay sectores que se ven más afectados que otros, por ejemplo la parte minorista es de las que más suele sufrir, sobre todo aquella que vendía productos no esenciales a la clase media.
Las empresas deben aplicar una estrategia de gestión de la crisis, esto conlleva a cambios en la forma de gerenciar una organización. Se debe cambiar la manera de pensar. Cosas que se daban por hechas antes ya no son válidas, la velocidad en la toma de decisiones y la capacidad de adaptación al entorno se hacen vitales ahora. Junto esta estrategia se debe mantener la visión de futuro, al pasar esta crisis, habrá grandes oportunidades de mercado, si no se toman acciones ahora es muy posible que ya luego sea tarde.
Aquí se expresan algunas acciones para la gestión de la crisis:
- ¿Conocer las costumbres de compra del cliente objetivo en hiperinflación, con patrones muy distintos a los que tenían hace un año y se deben estudiar en detalle.
- Tener claro el posicionamiento de la empresa, si se vende por precio o diferenciación, son mercados muy diferentes.
- Contar con una estructura financiera dinámica, costos de reposición y precio de venta, que se ajuste día a día a las condiciones del mercado. Dolarizar no es suficiente, la inflación en dólares ha crecido en los últimos meses.
- Manejo de las finanzas con una referencia en moneda dura para evitar la pérdida de referencia del dinero
- Disminuir costos fijos y usar el outsourcing como herramienta de reducción de costos
- Si no se puede cobrar de contado utilizar una prima por retraso para protegerse
- Adaptar precios, presentación, producto y canal de venta a la conducta de compra actual del cliente. La relación precio/calidad debe adecuarse al cliente. En Zimbabue, durante la hiperinflación, la mayoría de las empresas dijo que esto fue la clave para salvarse.
- Cuidar al recurso humano, remuneración más formación y ascensos internos funciona muy bien en situaciones así.
- Estandarizar procesos y usar tecnología para ser más eficiente. En otros casos de hiperinflación, apropiadamente 50% de las empresas dijeron que esto les permitió seguir operando.
- Crear escenarios, para el país, sector y empresa, para ir un paso por delante de los acontecimientos y estar lo mejor preparado que se pueda.
Aquí se expresan algunas acciones para preparar la empresa para el cambio económico:
- Trabajar la marca, es el principal activo con el que se va contar al pasar la crisis.
- Crear un plan de crecimiento, es muy común, en todas partes del mundo, las empresas que mueren de éxito por crecer sin control.
- La tecnología sufre un atraso, y es normal con respecto al mundo. Hay formas económicas de cerrar esa brecha y sacar ventaja ahora y después.
Superar la realidad económica que vivimos ahora requiere de un plan de gestión de crisis bien elaborado que sea dinámico y tome en cuenta diversos factores del entorno. Mientras más se tarde en implementar, menos serán las posibilidades de sobrevivir.
De igual manera si no se empiezan a ejecutar acciones de cara al futuro post crisis es muy probable que la ola nos pase por encima y entonces habremos aguantado lo peor para perdernos lo mejor.
