Los aumentos de sueldo que dejaron a los trabajadores sin poder adquisitivo
Cuando Nicolás Maduro inició su mandato presidencial en el 2013, el salario mínimo oscilaba los 200 dólares y en el presente se halla en 5 dólares. “Esto no es más que la destrucción de la moneda y por ende, de la nación. Esto es consecuencia del modelo socialista de control y expropiaciones”, manifestó de manera lapidaria, Ángel Alvarado, economista y miembro de la Comisión Permanente de Finanzas de la Asamblea Nacional.
A finales de noviembre y por sexta vez en el año, el mandatario nacional, Nicolás Maduro, decidió realizar ajustes en el salario mínimo para afrontar la inflación.
El último incremento, el cual entró en vigencia desde el primero del corriente mes, se hizo en un contexto de mucha tensión y expectativa con una inflación incontrolable.
La proporción
Los venezolanos consideran que los ajustes de sueldo son directamente proporcional al aumento de inflación y la miseria, pues en pocas horas la inflación los devora.
Expertos en materia económica atribuyen la inflación al enorme ascenso de la base monetaria que con medidas como las subidas de salarios por decreto ha instrumentado el Banco Central en Venezuela.
Explican que ese “estallido” de la masa monetaria en circulación, aunado a la disminución de los bienes en el mercado, afectó la producción y en consecuencia indujo a una inestabilidad entre la abundancia de dinero y la escasez de productos, que ejerce presión sobre los precios y destruye el poder de compra de los ciudadanos.
Contracción brutal
Y es que desde que el mandatario tomó el poder en 2013, la economía se ha contraído 53%, de acuerdo a las estadísticas emanadas desde el Poder Legislativo.
El parlamentario Ángel Alvarado ha recalcado que tal resultado ubica al país entre las 10 naciones con peor destrucción de riqueza.
Analistas destacaron que las políticas gubernamentales y la corrupción impactaron en la quiebra de la estatal petrolera Pdvsa. De hecho, recordaron que en 2013 se producía 2,75 millones de barriles diarios y en noviembre de este año 1,13 millones de b/d, lo representa una caída de más de 1,5 millones de b/d.
La guerra económica
El Gobierno, por su parte, habla de «inflación inducida», y no se atreve a hacer un mea culpa sino más bien acusar de esta situación a una «guerra económica» ejercida por Estados Unidos, la derecha “apátrida” y los empresarios «especuladores».
Y para “derrotarlos” se aventura a lo que le dicen sus asesores económicos externos: continuar ajustando los sueldos para paliar la agobiante inflación.
«¿Quién agrede al pueblo? ¿Quién impone un mecanismo totalmente falaz, criminal, de fijación de precios inflados, precios criminales? ¿El Gobierno bolivariano, o los capitalistas, la oligarquía?», se ha preguntado de forma retórica Maduro.
Bajo esa excusa ha realizado, en lo que va de año, seis aumentos salariales como medida de “protección” al pueblo contra el boicot económico y el bloqueo impulsado desde el exterior.
Los aumentos se han aplicado a todas las tablas de la administración pública y tienen incidencia en las pensiones de los adultos mayores.
Estos son los aumentos salariales antes del 20 de agosto:
– El 31 de diciembre de 2017, el jefe de Estado aprobó un incremento de 40% del salario mínimo, que entró en vigencia a partir del 1º de enero de 2018, con el que subió de 177.507 bolívares a 248.510 bolívares. Ese día también aplicó un aumento de la base de cálculo para el bono alimentación de 30 a 61 U.T, para que los trabajadores recibieran Bs 549.000, por lo que el ingreso mensual integral se ubicó en Bs 797.510,4.
– El 1º de marzo el ingreso mínimo legal de la clase trabajadora se ubicó en 1 millón 307.646 bolívares, luego del incremento del bono de alimentación a 915.000 bolívares y del aumento del salario mínimo a 392.646 bolívares.
– El 30 de abril el presidente Maduro decretó un nuevo aumento con el que el salario mínimo pasó de 392.646 bolívares a un millón de bolívares, mientras que el bono de alimentación subió de 915.000 a 1.555.500 bolívares mensuales. En general, ingreso mínimo legal se situó en 2.555.500 bolívares mensuales.
– Este 20 de junio el salario mínimo pasó de 1.000.000 a 3.000.000 de bolívares. A ello se suma el ajuste del monto del ticket de alimentación, que subió de Bs 1.555.500 a Bs 2.196.000, lo que resulta en un ingreso mínimo legal de 5.196.000 bolívares.
Con la reconversión monetaria
El 1º septiembre con la circulación del nuevo cono monetario: el Bolívar Soberano (Bs S), cuyo valor está «anclado al petro», la criptomoneda creada por el gobierno de Venezuela) el nuevo aumento salarial se ajustó a 1.800 bolívares soberanos, y el cesta tickets quedó en 180,00 bolívares soberanos, lo que dio un total de 1.980,00 Bs S.
Desde el primero de diciembre, el salario mínimo de los venezolanos se fijó en 4.500 bolívares soberanos, que junto al cesta ticket de 450 Bs S da un total de 4.950 Bs S, luego de que Maduro, anunciara que el valor del petro (moneda creada por el gobierno) subió a 9.000 bolívares soberanos.
Así, el salario mínimo nacional, equivale a medio petro y dicho ajuste implica un incremento de 150 % del ingreso mínimo nacional en un lapso de apenas 90 días.
25 aumentos de salario mínimo durante la gestión de Maduro. Un nuevo ajuste del salario mínimo no frenará la inflación, por el contrario, la potencia. Sus consecuencias impactarán en todos los sectores del país. #DDHH #Venezuela pic.twitter.com/2cWvxgICL8
— Observatorio de Conflictos (@OVCSocial) December 18, 2018
La “Revolución Bolivariana” suma desde su inicio, en 1999, un total de 47 incrementos del salario mínimo, de los cuales 25 corresponden a la gestión de Maduro.
Un reciente informe del Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), resaltó que el sueldo promedio de los venezolanos ha sido devaluado debido a la hiperinflación y aseguró que para el cierre de este 2018 será posicionada en un 1.700.000%.
El señalado informe dejó constancia del efecto devastador que ha tenido la hiperinflación en el poder de compra del salario. Además, señala cómo en los últimos cinco años ha decaído el valor real del salario mínimo en Venezuela.
