A morderse la cola
Tarde y mal, afirman algunos economistas que decidió el Gobierno la devaluación. Pero ya está allí, y casi sin dar respiro comienza el mismo Gobierno a morderse la cola. Argumentó que la devaluación impulsaría el crecimiento de la producción y de la exportación, pero lo primero que hace horas después, es anunciar millones de dólares en importaciones. Pero no de equipos, para facilitar la recuperación de la fuerza industrial del país, sino para castigar a comerciantes a los cuales tacha de especuladores.
¿Por qué, por ejemplo, en vez de destinar centenares de millones de dólares a importar 60.000 autos para venderlos a precio calculado en base a 2,60, no destina ese dinero a incentivar la producción nacional, pongamos por caso? Devaluar la moneda, con todas sus consecuencias inmediatas, no tiene sentido si al mismo tiempo se va a incrementar la importación. Destinar divisas a la importación cuando se ha hecho necesario devaluar para obtener más bolívares, es morderse la cola.
Aunque es cierto también que con su desacertada economía manejada a lo largo de once años en base a una ideología política obsoleta y comprobadamente fracasada, el gobierno parece haberse convertido en un permanente aficionado a morderse la cola. Han sobrado y siguen sobrando los ejemplos.
Tendrá en 2010 el Presidente Chávez muchos millones de bolívares más a plena disposición para tratar de captar los muchos votos que necesita para conservar bajo control a la Asamblea Nacional. Pero mientras 60.000 ciudadanos ruedan con sus nuevos carros argentinos e iraníes y comunas y cooperativas siguen fracasando en la construcción de una exitosa y productiva economía endógena, 26 millones de venezolanos tendrán suspensiones diarias de electricidad, vivirán permanentemente tratando de sobrevivir a la delincuencia y comprobarán día tras día que los milagros no existen cuando de economía se trata.
Lo malo es que a ellos ni siquiera les quedará el recurso de morderse la cola, a menos que vuelvan a votar por las propuestas del chavismo en septiembre próximo.
