El desfile militar conmemorativo
Lo que no ocurre sino en países como Corea del Norte es hacer un desfile militar en honor a un presidente fallecido. No dudamos que una parte del país tuvo y tiene sentimientos de afecto por el difunto Presidente Chávez y eso es respetable. Lo que no es aceptable es que un personaje político, por importante que haya sido, se convierta por decisión de los que ejercen el poder en un acto de las fuerzas armadas que por definición no pertenecen a un partido sino a la nación.
Además tenemos que manifestar que hacer esta muestra de poderío militar en un momento en el que existen a todo lo largo del país protestas sociales, cuya represión ha causado la muerte a 18 personas, no es un acto conmemorativo sino una agresión contra por lo menos la mitad de la población venezolana.
El régimen es sordo y mudo frente a las causas del malestar que existe en el país y se escuda con la presencia de representantes de varios países latinoamericanos para darle a entender al mundo que aquí todo esta bien y en orden
Señores invitados a esta demostración militar no se confundan: la situación del país va de mal en peor y el movimiento de protestas pacíficas no se detendrá hasta que no ocurran cambios fundamentales en la conducción del estado y se castigue a aquellos que han asesinado, torturado y herido a ciudadanos desarmados.