La tendencia ya no se revierte
Por más manifestaciones de última hora, por más autobuses que transporten a gente afranelada de rojo, por más mensajes optimistas de Fidel, por más que brinque y cante, la suerte está echada y el domingo los números darán un nuevo vencedor.
Creemos que se producirá el domingo una avalancha de votos, el sentimiento democrático del pueblo venezolano está saliendo hasta por los poros y el deseo de vivir en paz y reconciliado es superior al odio y a la mentira.
El miedo desaparece cuando la gente se da cuenta de que si es cierto que hay un camino para superar la locura y que con el pequeño esfuerzo de votar por un cambio todo saldrá bien y nuestro país volverá a ser la tierra de gracia que con acierto alguien vio y dijo hace muchos siglos.
Eso sí, el domingo a levantarse temprano, a mostrar alegría en las largas colas y estar atentos durante el día a los resultados que de alguna manera se verán y se sabrán.
El lunes Venezuela amanecerá siendo de verdad de todos, no habrá excluidos ni vencidos, sino un país que se parecerá a nuestra Vinotinto que nos brinda alegría y esperanzas a todos por igual.