10° edición de la Subasta de Fundana se realizará en Ciudad Banesco
La Subasta de Fundana cumple este año su décima edición. Como ha sido tradición, Ciudad Banesco cede sus espacios para la exposición de las obras a partir de este 30 octubre y para la puja que tendrá lugar el 2 de noviembre.
«Este año invitamos a los artistas a inspirarse en el concepto ‘Mírame, mírate, simbolizando nuestra responsabilidad de mirarnos a nosotros mismos, a los niños de Fundana y que estamos haciendo para cambiarles el futuro», dijo Betzy Aizaga, integrante de la Junta Directiva de Fundana.
«La gran bruja», una serigrafía de 1978 del desaparecido maestro Oswaldo Vigas estará entre las obras a subastar. Además repiten artistas como Ben Abounassif, Milton Becerra, Daniel Benaím, Ricardo Benaím, Francisco Bugallo, Carlos Cruz Diez, José Antonio Dávila, Eduado (EDO) Sanabria, Enrique Etievan, John Fraser, Jason Galarraga, Grillo S., Corina Hernández, Julio Maragall, Carlos Medina, Jorge Mena, Julio Pacheco Rivas, Ana Isabel Reyna, Luisa Richter, Luis Alfredo Suárez, Abigail Varela y Romero Britto.
La exposición estará abierta al público a partir del 30 de octubre en el horario comprendido de 10:00 a.m. a 5 de la tarde. La subasta tendrá lugar a partir de las 11:00 a.m. el día 2 de noviembre.
El año pasado Fundana recaudó más de 9,4 millones de bolívares. «Razante» de Rafael Barrios, subastada en Bs. 1,4 millones, fue la mejor cotizada, seguida de «La Familia» de Oswaldo Vigas (Bs. 700 mil); «Encuentro N°60» de José Antonio Dávila (Bs. 600 mil); «Divergences» de Pancho Quilicci (Bs. 350 mil) y «Esfera de Fulguración» de Héctor Ramírez (Bs. 300 mil).
Fundana es uno de los socios sociales de Banesco. Es una asociación civil sin fines de lucro que desde 1991 brinda atención integral residencial a niños entre recién nacidos y los siete años de edad que han sido víctimas de maltrato, negligencia y/o abuso; lo que ha llevado a que sean separados de su medio familiar biológico de forma temporal o permanente. Durante su residencia en Las Villas, además de un hogar cálido, los niños reciben atención y formación en todas las áreas donde lo requieran, gracias al trabajo y dedicación de un grupo de profesionales, madrinas y tías comprometidos con esta generación de relevo.
