Cloud Computing: prioridad de negocio para la competitividad

El papel de las tecnologías de la información (TI) ha venido año tras año cambiando drásticamente hasta convertirse en un pilar importante en todos los escenarios. Desde redes eléctricas, el control de tráfico, la atención médica, el suministro de agua, e incluso la alimentación y la energía, hasta gran parte de las transacciones financieras en el mundo, dependen hoy en día del desarrollo de las TI.

John Chambers, CEO de Cisco Systems, dijo recientemente en una columna de opinión que “la única constante es el cambio, y las compañías que no cambian se quedan atrás”. En un mundo tan evolucionado es importante que el entorno empresarial entienda esta premisa, pues de la adopción de nuevas filosofías y prácticas empresariales dependerá el futuro de muchas compañías.

En este orden de ideas, muchas de las tendencias importantes de hoy en día se están combinando en un concepto bien interiorizado y vivido por Cisco: la Internet de Todo, que es entendida como la conexión inteligente de las personas, los procesos, los datos y las cosas.

Así, el hecho de estar cada vez más conectado desde cualquier dispositivo, lugar y red cobra un nuevo significado no solo para el común sino mucho más para el entorno empresarial.

Filosofía para el éxito

Dentro del concepto de la Internet de Todo, es claro que la computación en la nube o Cloud Computing (en inglés) sugiere una transformación de los negocios que conlleva al planteamiento de un nuevo modelo empresarial, no sólo para ahorrar costos de operación sino además para lograr mayor eficiencia y productividad.

“Hoy en día el crecimiento de la computación en la nube y su potencial para transformar la prestación de servicios, ha despertado el interés de las de organizaciones en el mundo por adoptar este modelo como una gran alternativa para optimizar los recursos de TI y así caminar hacia el éxito corporativo, donde el trabajo colaborativo cobra especial significado”, apunta Rafael Vidaillet, Cloud Business Development Manager de Cisco.

Una mirada hacia dentro

En América Latina, la tendencia hacia la adopción del Cloud Computing ha ido creciendo en los últimos años, sobre todo en el renglón de las PYMES (Pequeñas y Medianas Empresas).

En el caso específico de Venezuela, las empresas vienen entendiendo la importancia de migrar  hacia la nube y han ido externalizando sus servicios de infraestructura IT y delegando en terceros la gestión de sus centros de datos para poder enfocarse con más cuidado en su negocio.

“Algunos estudios estiman que este mercado de infraestructura IT en Venezuela está alrededor de los $ 110 millones y pudiera estar entorno a los $ 150 millones para el año 2016”, comenta César Lozano, Cloud & Managed Services Manager de Cisco para la región de CANSAC.

Los servicios que van cobrando mayor demanda entre las empresas venezolanas actualmente son  el hosting dedicado, almacenamiento, virtualización, seguridad; pero aun así el país sigue presentando retos importantes: seguridad  y  la confiabilidad. Muchas empresas aún no se atreven a depender de la Web para depositar información crítica para su negocio, bien por el manejo que pueda dársele o por fallas que puedan presentarse en la conectividad de su empresa hacia la nube.

Sin embargo, “en un mercado volátil y en rápida evolución, la capacidad para aprovechar las nuevas tecnologías y para mantenerse competitivo es más importante que nunca”, apunta Rafael Vidaillet.

Entonces, ¿qué hacer?

Respondiendo a los retos que afrontan las empresas venezolanas el Cloud Computing ofrece alternativas que brindan a cada empresa las herramientas necesarias para migrar al Cloud de manera confiable.

Siendo la seguridad y confiabilidad unos de los miedos de mayor importancia, la nube privada es una alternativa para las compañías que necesiten tener el control sobre el flujo de trabajo de sus servicios y políticas de seguridad, así como la metodología empresarial para prácticas de colaboración. Además, uno de los atributos importantes de este tipo de nubes es que puede recibir servicios como Disaster Recovery y backup externo.

Entretanto, con nube pública es posible implementar operaciones para múltiples organizaciones y éstas utilizan no sólo un único conjunto de redes y máquinas, sino de almacenamiento, procesamiento y gestión de datos ajustados a las a sus requerimientos específicos, aunque la confiabilidad de la información termina viéndose comprometida.

Una opción imparcial

Para las empresas que no terminan de hallar el camino más seguro, la Nube les presenta una opción eficaz y manejable: La nube híbrida. Esta permite la interacción de ciertas aplicaciones de la nube privada con la pública en donde la empresa tiene la potestad de compartir la información que considera de uso público y proteger con mucho más celo la que resulte altamente confidencial.

“Tener ciertos servicios como  cuentas de correo, vendedores virtuales, comunicaciones B2B, entre otros en el Cloud, sube drásticamente el nivel de servicio, satisfacción de clientes y continuidad de negocios con mínima interrupción, de allí que la nube híbrida resulte una interesante elección para los que no van 100% al Cloud externo”, afirma Vidaillet.

De este modo, dar el paso para adoptar la dinámica de computación en la nube otorga beneficios importantes: flexibilidad al poder  acceder a la información desde cualquier dispositivo y desde cualquier lugar; un menor costo de infraestructura, agilidad e implementación rápida, un nuevo enfoque para el mayor aprovechamiento de los recursos de TI y la posibilidad de desarrollar nuevos modelos empresariales.

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