La alimentación sana es clave en la prevención de cáncer colorrectal y de riñón

El cáncer es una patología que puede originarse en cualquier tipo de células. Tanto en el colon, en el recto ya nivel renal, los factores de riesgo coinciden: sedentarismo, obesidad, mal nutrición (baja en fibras y en agua), alcoholismo, tabaquismo. La doctora María Belén Fuentes, médico oncólogo del hospital oncológico Luis Razetti, recalca que “la dieta debe ser alta en fibra y vegetales, a fin de que se tenga una actividad intestinal adecuada. Y por supuesto, tomar agua… Los órganos que más se afectan por la falta de agua son los riñones y el colon.”

Cáncer colorrectal: enfermedad silenciosa con altas posibilidades de supervivencia

Este tipo de cáncer es el cuarto en incidencia (prevalencia en la población) y mortalidad en el mundial. Según la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer aproximadamente se diagnostican 1.200.000 casos anualmente en el mundo, con una distribución similar entre ambos sexos. Para el 2014, se registraron en el país 2772 nuevos casos y 1387 muertes producto de esta patología.

Es un cáncer que se desarrolla durante un largo período de tiempo hasta que se presentan síntomas relacionados. Las células malignas comienzan a formarse dentro de las paredes intestinales y lentamente se convierten en tumores. En los primeros estadios de la enfermedad, se recurre a cirugía para eliminar el tumor, y dependiendo de cada caso, se refuerza el tratamiento con quimioterapia y/o radioterapia. Si se detecta a tiempo, en el estadio I, hay un 74% de sobrevida.

A medida que progresa, el cáncer invade la pared del colon, los ganglios linfáticos y los vasos sanguíneos, hasta que finalmente, en el estadio IV, se esparce a otras áreas del cuerpo, convirtiéndose en una enfermedad metastásica (cáncer colorrectalmetastásico).

Se calcula que entre el 50 y el 60% de los pacientes diagnosticados con cáncer colorrectal desarrollarán metástasis . Como en todos los tipos de cáncer, una vez que el tumor se ha extendido a otra parte del cuerpo, disminuyen drásticamente las oportunidades de sobrevida.

Sin embargo, la doctora Fuentes afirma que “hace más de 10 años, cambió la historia de la enfermedad metastásica de cáncer de colon, con el advenimiento de nuevos tratamientos de terapias dirigidas. Antes de este tipo de medicamentos, la expectativa de vida de un paciente con enfermedad metastásica era de aproximadamente 6 meses, y ahora es hasta más de 2 años.”

Prevención: el mejor ataque contra el cáncer colorrectal

Es de suma importancia vigilar pequeños detalles para detectar a tiempo esta patología. El cáncer colorrectal sólo presenta síntomas cuando ya está avanzado, es esencial a partir de los 40 años de edad, llevar un control médico adecuado, considerando el mayor riesgo de desarrollar la enfermedad. “La evaluación inicial es con técnicas sencillas, no invasivas tal como un examen de sangre oculta en heces, después de esto, se iría a una colonoscopia. Actualmente, se puede hacer colonoscopia virtual. Es una nueva modalidad, la cual consiste en una tomografía especial, siendo una opción para los pacientes que no quieran someterse a un estudio endoscópico”, comenta la doctora Fuentes.

La colonoscopia tradicional es un método diagnóstico que permite visualizar el colon desde su interior y puede detectar todo tipo de lesiones. Es segura, accesible y debe ser utilizada para descartar cualquier problema una vez se presenten síntomas, los cuales pueden ser cambio en los hábitos intestinales, constipación, pérdida de peso, fatiga, sangre en las heces y dolor abdominal.

Cáncer de riñón: menor incidencia mundial, más sectorizado

El cáncer de riñón es un tipo de cáncer no tan común como el colorrectal, y su tratamiento es bastante complicado. Dependiendo del estadio en el que se diagnostique, el tratamiento puede ir desde la cirugía hasta la terapia dirigida y la inmunoterapia. El carcinoma de células renales es el tipo de cáncer más común desarrollado en el riñón, 9 de cada 10 casos pertenece a este tipo. Este carcinoma crece como un tumor, en uno o en ambos riñones.

Es más frecuente en personas de edad avanzada, pues es poco común en menores a 45 años. A nivel mundial, la incidencia en los hombres duplica la de las mujeres. En el 2012, se registraron más de 500 nuevos casos en el país. Además de los factores de riesgo antes señalados, en el caso del cáncer de riñón, también pueden ser determinantes la hipertensión arterial, el uso prolongado de analgésicos y la exposición a agentes tóxicos como asbesto, tricloroetileno, petróleo o cadmio.

Sin embargo, como para todos los tipos de cáncer, la expectativa de vida aumenta al detectarse en los primeros estadios. Es muy importante estar atentos ante cualquier tipo de síntoma: dolor o ardor al orinar, color turbio en la orina, náuseas, pérdida de peso, aumento de volumen en cara, manos o pies y recurrencia de infecciones urinarias.

De acuerdo con el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos, el desarrollo de nuevas terapias ha contribuido a reducir el número de muertes ocasionadas por Cáncer Colorrectal y de Riñón. “Es por ello que Bayer ha impulsado diversas campañas informativas sobre estas enfermedades enfocando la importancia de la prevención, el diagnóstico precoz y el acceso de los pacientes a las terapias dirigidas; ayudando a mejorar la calidad de vida del paciente oncológico y aumentando la tasa de sobrevida”, indicó Belkis Monsalve, asesor médico en el área de Oncología de Bayer en Venezuela.

Con información del Grupo Open Mind.