La bicicleta de Holanda inspira nuevas propuestas inteligentes y sostenibles
En Holanda la bicicleta es más que un medio de transporte, es un estilo de vida que crece año a año y que cada vez cuenta con más usuarios, y en 2014 registró un aumento del 6,5 %, un fenómeno que ha dado lugar a nuevas propuestas como la bici inteligente o carriles sostenibles.
En ciudades como Rotterdam el incremento del uso de la bicicleta en los últimos 10 años ha sido de un 60 %, explicó a Efe el vicealcalde y concejal de Sostenibilidad, Movilidad y Organización, Pex Langenberg.
«El incremento del uso de la bicicleta en Rotterdam es evidente. Más de 70.000 personas utilizan de forma cotidiana este medio de transporte, de manera que prevemos la construcción de nuevas infraestructuras, instalaciones y servicios para las bicicletas tradicionales y las eléctricas, ya que se trata de un mercado en auge», explicó.
La ciudad dispone para ello de un plan específico para 2015 que está dotado de 2 millones de euros, explicó.
Según el estudio de movilidad anual (Mobiliteitsbeeld) publicado por el Ministerio de Infraestructuras y Medio Ambiente Holandés, Amsterdam y Utrecht se sitúan en las primeras posiciones en términos del uso de este medio de transporte.
El aumento del ciclismo se debe en gran parte al creciente uso de la bicicleta eléctrica, con un uso total del 10 % de la población, especialmente popular entre los mayores de 65 años.
El sector de la población mayor de 65 años es a su vez el rango de población con el índice más elevado de mortalidad debido al uso de este medio de transporte.
En 2014, según datos registrados hasta septiembre, 184 personas perdieron la vida por accidente de bicicleta y 745 sufrieron algún tipo de daño, siendo un total de 124 los mayores de 65 años que perdieron la vida.
Con el objetivo de solucionar este problema, el Ministerio de Infraestructura y Medio Ambiente del Gobierno holandés ha desarrollado a través del Instituto de investigación TNO la primera bicicleta inteligente eléctrica.
Está previsto que salga al mercado en dos años por un precio que oscilará entre los 1.700 y 3.200 euros por unidad.
«A través de sensores, una cámara trasera y un sistema de vibración en el asiento y en el manillar, la primera bicicleta inteligente avisa al conductor de los peligros inminentes», señaló el investigador del Instituto TNO, Maurice Kwakkernaat, al diario holandés Algemeen Dagblad (AD).
La ministra de Infraestructura y Medio Ambiente, Mélanie Schultz, se muestra satisfecha con el nuevo prototipo lanzado el pasado mes de diciembre.
«Es importante que la gente continúe montando en bici, aunque sean personas mayores. Con esta bicicleta inteligente podemos ayudar a las personas a conducir con mayor seguridad», comentó en Holanda.
Otras medidas como la reducción de la velocidad a 25 kilómetros por hora frente al máximo de 30 en la actualidad, han sido presentadas como propuesta por el Gobierno con el objetivo de garantizar que el número de lesiones por accidentes de bicicleta disminuya, debido sobre todo al incremento de bicicletas eléctricas.
Además de nuevas propuestas, son necesarias nuevas infraestructuras y en este sentido en Utrecht, ciudad que acogerá el próximo 1 de julio la salida del Tour de Francia, se está construyendo el aparcamiento de bicicletas más grande del mundo junto a las instalaciones de la estación central.
Este parking para bicis contará con más de 12.500 plazas y será inaugurado en 2016.
Pero otras infraestructuras más sofisticadas si cabe se han construido también en 2014, como es el caso del «Carril Van Gogh», recientemente inaugurado cerca de Eindhoven, obra del diseñador social holandés Daan Roosegaarde.
«Se trata de un carril inspirado en la «Noche estrellada» de Vincent Van Gogh que cuenta con un sistema que se carga durante el día con luz solar para iluminar por la noche de manera sostenible», explicó Roosegaarde a Efe.
«Con este carril, al igual que hemos desarrollado con las autopistas inteligentes, queremos crear infraestructuras sostenibles e interactivas y apostar por las ciudades del futuro que unan tecnología, belleza, sostenibilidad y que conecten a las personas con la ciudad», añadió.
Para Shirley Agudo, fotógrafa estadounidense afincada en Holanda desde hace 16 años que acaba de publicar su segundo libro sobre la cultura de la bicicleta en Holanda «Los holandeses y sus bicis», los Países Bajos son «un referente en relación al mundo del ciclismo».
«Sirve de inspiración para muchos otros países porque no hay otro en el mundo que pueda enseñar mejor sobre motivación, economía, infraestructuras, sostenibilidad, seguridad y salud vinculados al mundo de la bicicleta», explicó a Efe.
Y es por eso que a través de su libro, con más de 700 fotografías, pretende inspirar y transmitir la misma fascinación que ella siente por el uso de la bici en Holanda, «un país que vive y respira ciclismo».
Holanda cuenta con 35.000 kilómetros de carril bici, de los cuales 580 kilómetros son asfaltados.
Se calcula que en ese país, que tan solo tiene registrados 17 millones de habitantes, hay 18 millones de bicicletas, de las que 1 millón son eléctricas.
