Ropa y accesorios inteligentes ¿ventana al espionaje?
En cierta ocasión Richard Daddario, subcomisionado de la lucha contra el terrorismo bajo las órdenes del otrora jefe de la policía de la ciudad de Nueva York Ray Kelly, me dijo que el sistema de video vigilancia que cubre Manhattan desde Midtown al parque Battery, en realidad no era tan diferente a otra innovación previamente introducida para combatir el crimen: el alumbrado público. Información cnnexpansion.com
Las farolas de las calles significan que los criminales no pueden operar con impunidad al amparo de la oscuridad. Para Daddario las cámaras de vigilancia eran el mismo principio, ligeramente ampliado.
“Esa comparación parece un poco simplona y falsa”, opina Glenn Cohen, profesor de la Facultad de Derecho de Harvard, quien habló recientemente sobre la privacidad y la tecnología en el Instituto Radcliffe de Estudios Avanzados de Cambridge, y con quien intercambié después correos electrónicos.
“Con las farolas no existe la posibilidad de ‘desviación de uso’, en donde son introducidas con un propósito, pero luego son usadas para algo muy diferente en el futuro, como los números de la seguridad social. El efecto de las farolas es temporal y no graban lo que hacemos para el futuro indefinido. Por último, hay pocas actividades que las personas realmente quieren hacer en la oscuridad en público, por lo que la pérdida de la penumbra no es una pérdida para muchas personas.