Tres Marías exponen en Mexico en III Encuentro Internacional del Textil

A partir del 17 de Octubre se llevará a cabo el III Encuentro Internacional de Arte Textil en Miniatura “Tierras Rojas”, en el Museo Francisco Goitia, en Zacatecas, México. Igualmente, puesto que la exposición es itinerante, se podrá apreciar en el Museo Anguiano o el Museo de las Artes de la ciudad de Guadalajara, y en la Casa del Tiempo de la Universidad Autónoma Metropolitana en la ciudad de México.

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Zacatecas es un estado en su mayoría desértico, ubicado en el centro de México. La ciudad capital, del mismo nombre, fue recientemente proclamada por la UNESCO patrimonio cultural de la humanidad. Fundada en 1546, estuvo signada por la ambición de los europeos que al encontrar minas de plata se dieron a su explotación. La ciudad se extiende por las faldas de varias montañas, entre las que destaca La Bufa, que es una hermosa gasa de urdimbre rocosa de llamativos colores, considerada por ello el elemento característico del paisaje.

En este encuentro participan tres artistas venezolanas: María Antonieta Arnal, María Elena Núñez y María Margarita Richter. Para los organizadores del evento, irónicamente, las Tres Marìas. Así las llamaron y explican: “En México existe un pequeño pueblecito que está entre la ciudad de México y la ciudad de Cuernavaca que se llama Tres Marías, donde exclusivamente se venden antojitos mexicanos a los turistas (…) Además tenemos las Islas Marías, lugar donde antiguamente se enviaba a los presos más peligrosos del páis”; otra ironía más, pues nada más alejado de las artistas o de su propuesta plástica. Tan solo una manera muy latinoamericana de comunicarnos al mezclar con el humor todo evento azaroso.

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María Antonieta Arnal trabaja actualmente en una línea de autorretrato, por tanto utiliza materiales de uso doméstico como cables, cintas de video, fotografìas, etc., objetos todos ellos que tienen que ver con su vida.

Para esta exposición, interpretó la propuesta a través de los juegos de la infancia. Realizó una mini instalación formada por tres vestiditos, de tonos amarillos, anaranjados y rojos, colocados en círculo sobre un espejo. “Traté de imaginarme una familia jugando en medio de las tierras rojas. El espejo vendría a ser lo que refleja esa familia: alegría, amor, unión”.

María Elena Núñez se inspiró en una pared de bahareque (barro arcilloso sostenido en rejillas de bejuco) que tiene más de 100 años y es lo que queda en pie de una casa en ruinas. A esa pared predominantemente roja le tomó numerosas fotografías.

Y añade:…”Las obras con las que participo en la exposición llevan por título «Texto forjado» y «Texto cifrado» porque para mí son como escrituras hechas en tiempos distintos: el que tejió la pared, el que hizo la casa y que luego la abandonó, la acción del tiempo y del medio ambiente erocionando, deshaciendo el barro compactado, las pequeñas enrredaderas que tejen en la pared junto con las arañitas, todo confluye en contar una historia, por eso consideré ambas obras como textos, como escrituras sobre las que imprimí mi propio trazo”.

María Margarita Richter la interpretó en su planteamiento abstracto, “con el vigor y la energía que sentí se creaba con las armonías escogidas, teniendo muy interiorizada la fuerza que existe en tierras rojas, como tierras áridas, de mineros, pero de gran belleza y con la semilla de vida en su interior”.

Esta artista ha trabajado en dibujo y pintura. Con los textiles, tensa la tela sobre bastidores que pueden ser de distintas dimensiones y sobre ésta dibuja. Borda sobre el dibujo con variedad de textiles, en algunos casos incorporando metales, cerámicas. Como herramientas, usa agujas de diferentes tamaños, usadas antiguamente en el área de la tapicería artesanal.