Las top models se dan cita en París para desfilar vestidas por Isabel Marant
La diseñadora Isabel Marant atrajo este jueves en París a algunas de las modelos más conocidas de la última década, desde Gigi Hadid (21 años) hasta Carolyn Murphy (42), para demostrar que su moda no va de edades, sino de actitud.
En la plaza Colette del Palacio Real de París, las mujeres de Marant desfilaron con paso firme como esencia misma del carácter de la famosa marca parisina, referencia desde los años 90 del que llaman «el chic francés», tan difícil de definir.
La diseñadora lo hizo mediante faldas largas con un toque bohemio, con discretos plisados o con estampados de florecitas pero siempre con mucho movimiento.
Accesorios
En los accesorios, el look se combina con altas botas mosqueteras un poco anchas -y no tan pegadas a la pierna como se llevan este año- y con masculinas chaquetas «oversize» por encima.
«No hay una inspiración en sí, es más sobre cómo te gusta llevar la ropa en invierno, manteniendo la largura pero no renunciando a lo sexy, a lo cómodo y agradable, algo que siempre es muy importante en mis colecciones», explicó la diseñadora tras el desfile.
Marant contó en su pasarela con top models internacionales de la talla de las ya citadas Gigi Hadid y Carolyn Murphy (una de las mejor pagadas del mundo, alejada de las pasarelas desde hace años), pero también Amber Valletta, la dominicana Lineisy Montero o Anja Rubik.
La cantante Alicia Keys fue, además, una de las invitadas estrella del desfile.
Estilo gipsy
Junto a las faldas y vestidos de estética «gipsy», completaron la pasarela una serie de pantalones vaqueros con incrustaciones: bien con flores bordadas o con incrustaciones de brillantes cristales.
Por último, las siluetas de sastrería con chaquetas holgadas y camisas y pantalones ultra anchos completaron la propuesta de Isabel Marant que, siendo fiel a la sobriedad parisina, se decantó por tonos oscuros, en los que solo destacaron algunos toques de lurex en los tejidos y los estampados: leopardo, flores y rayas.
«Quería establecer un equilibrio entre los vestidos y las chaquetas ‘oversize’: es una silueta que trabajamos a menudo tratando de mantener el look ligero mediante faldas sin forros para que haya un balance en las líneas», indicó Marant.