Contradicciones del Socialismo del Siglo XXI

Rafael Piña Pérez25 diciembre, 2014

El llamado socialismo del siglo XXI, expresión acuñada por el sociólogo alemán- mexicano Heinz Dieterich, quien desde hace varios años retiró su apoyo a este régimen, considerando que no habían extirpado la propiedad privada y el capitalismo en Venezuela. Todos los países que han transitado el comunismo, llamado también socialismo real, destruyeron el capitalismo y con ello la propiedad privada y el mercado. El sistema económico, político y social que establecieron, prometió superar la pobreza, extinguir las clases sociales y superar al capitalismo en bienestar social. En la práctica fue todo lo contrario, se apoderó del Estado una plutocracia o nomenclatura con todos los privilegios y prebendas por encima de toda la sociedad, reprimiendo todo vestigio de disidencia al sistema inepto y represivo instaurado. El comunismo se desplomó por ineficiente en la producción de bienes y represivo en lo político y social. Vasta observar resabio amargo de Corea del Norte y Cuba, para ver hoy el fracaso de un sistema económico, político y social.

El socialismo del siglo XXI que prometió el finado presidente Chávez se identificó desde 1999 con el régimen cubano, cometiendo el mismo error de todos los países comunistas de identificar socialización y socialismo con estatismo, pretendiendo instaurar en nuestro país una sociedad dependiente del Estado, cuando debe ser al revés, el Estado dependiente de una sociedad plural y democrática. Veamos en quince años de este socialismo del siglo XXI algunas de las contradicciones que muestran los fracasos en sus políticas públicas:

Dicen hasta la saciedad que Venezuela posee las reservas de petróleo más altas del mundo y hoy estamos importando gasolina, nafta, diesel y lubricantes. El consumo nacional de petróleo en Venezuela está por el orden de 700.000 barriles diario y la capacidad de refinación total es de 1.300.000 barriles diario, pero está inutilizada más de la mitad por falta de mantenimiento y obsolescencia tecnológica.
Igualmente han vendido la idea falsa de que poseemos las mayores reservas de gas del mundo y hoy estamos importando gas de Colombia para completar la demanda del Zulia y del complejo refinador de Paraguaná. Se llegó al extremo de ofrecer un gasoducto para atravesar la selva amazónica desde Venezuela hasta Argentina con un trayecto de 10.000 km, un costo estimado en 30.000 millones de dólares. Proyecto faraónico sin viabilidad económica, ni ambiental y sin gas suficiente para alimentarlo.
Estamos exportando a Cuba más de 100.000 barriles diario de petróleo liviano con financiamiento a largo plazo y una tasa de interés del 2% anual, mientras estamos importando de Argelia eses tipo de crudo que se requiere para diluir y mejorar los crudos pesados y extra pesados de la faja del Orinoco.
Hablan de la Nueva PDVSA como más eficiente que la PDVSA que heredaron, pero en la PDVSA actual ha aumentado el índice de accidentes graves en un 30% con pérdidas humanas y daños a las instalaciones. Cabe recordar la explosión de Amuay hace más de dos años y el derrame de petróleo en el río Guarapiche en Monagas en el año 2011.
El plan siembra petrolera estimaba producir unos cinco millones de barriles diario para 1912 y estamos produciendo menos de 3 millones diario. Venezuela ha venido perdiendo mercado petrolero para sus exportaciones por venir disminuyendo la producción. Hoy con la reducción de los precios del petróleo fuera mas holgada esa merma de los precios si no se hubiese dado la reducción de la producción y consiguiente disminución de la exportación de petróleo y derivadoa
La nueva PDVSA ha elevado en más de un 150% la nómina para producir menos cantidad de petróleo.
La nueva PDVSA ha elevado la deuda de la corporación de 7.000 millones de dólares a unos 90.000 millones de dólares entre deuda financiera, deuda a proveedores, deuda por indemnizaciones pendientes y deuda laboral.
Tenemos controles de precios y de cambios, sin embargo tuvimos una de las inflaciones más altas del mundo en los últimos cuatro años, la más alta del mundo en el año 2013 y para este año 2014, es también la más alta del mundo.
El gobierno culpa a la oligarquía parasitaria de la escasez y la inflación, pero la tienen adentro engendrada y protegida por el poder que apoya a falsos empresarios en la entrega de divisas y en las importaciones que han enriquecido de la noche a la mañana a un grupo de vivos vinculados con el alto gobierno.
Hablan de guerra económica de los empresarios y la verdadera guerra es el acosamiento del gobierno a la economía privada, con amenazas a la propiedad privada y estatizaciones que han conducido a la quiebra a muchas empresas. Las empresas estatizadas que aún están activas, producen menos que antes cuando estaban en manos privadas. Es el caso por ejemplo de AGROISLEÑA, Lácteos Los Andes, las cementeras, SIDOR, unas cuantas fincas que eran productivas y devenidas hoy en tierras incultas, etc
Aprueban aumentos de impuestos que debieran realizarse cuando una economía está en auge y no en fase depresiva como lo está la economía venezolana, situación causada por querer implantar un modelo económico que ha fracasado en todas partes del mundo, que no es viable pues.
Hablan de sabotaje al sistema eléctrico, cuando el saboteador es el propio gobierno que ha descuidado todo el sistema de generación, transmisión y distribución de electricidad. Se olvidaron que el fundador del Estado Soviético Vladimir Ilich Lenin afirmaba que sin electricidad no hay desarrollo ni bienestar.
Han implementado 22 planes de seguridad y la inseguridad sigue creciendo en homicidios, atracos y otros delitos contra las personas y la propiedad.
Ha ingresado al país más de un billón de dólares por exportaciones petroleras en los 15 años de este régimen y hoy no tenemos suficientes divisas para realizar las importaciones. Modificaron en el 2005 la ley del BCV para tomar las reservas internacionales por parte del poder ejecutivo, como si fuese una cuenta corriente o una cuenta de ahorro del gobierno. Por esta vía se apoderaron de más de 130.000 millones de dólares, transgrediendo los principios de la teoría y la política monetaria. Inventaron conceptos como reservas excedentarias y nivel óptimo de reservas en procura de justificar la transferencia directa de dólares de las reservas internacionales al gobierno, sin entregar los bolívares correspondientes al ente que los compró que fue el BCV.
Hablan de que hoy somos más independientes y soberanos y dependemos más del petróleo y las importaciones. Producimos menos y tenemos que importar más proporcionalmente hablando.
Dicen haber reducido el desempleo del 11.2% que lo encontraron en 1999 al 7% de la población económicamente activa. ¿cómo justificar esta falacia en una economía que se viene contrayendo, mientras se incorporan cada año más de 500.000 personas al mercado de trabajo. La masa laboral que se incorpora cada año es creciente dado el crecimiento de la población. Aquí cabe anotar que desde 1999 a esta fecha han cerrado unas 12000 empresas de acuerdo a los informes de coyuntura de CONINDUSTRIA.
Dicen también que han reducido la pobreza general del país, pero los pobres siguen viviendo en los mismos ranchos y los cinturones de miseria siguen creciendo en las principales ciudades del país. Incluyen como ocupados a los que reciben algún ingreso en las misiones, reduciendo artificialmente el desempleo y la pobreza. La pobreza se combate con empleos permanentes de calidad, eficientes servicios públicos y viviendas adecuadas a las condiciones humanas.
Tratan de ocultar la triste realidad económica y social procurando un record Guinness con una hallaca gigante hecha en “revolución” cuando el verdadero record de este régimen es el de lograr la inflación más alta del mundo, acompañada del mayor índice de escasez general de bienes y servicios que se haya registrado en Venezuela durante más de 60 años.
Cuanto más se invierte en electricidad, hay menos generación, transmisión y distribución de este servicio vital en todo el país.
Con el país con más instrumentos legales para combatir la corrupción, ésta crece como la verdolaga en los campos en períodos de lluvias, con impunidad y complicidad de todos los poderes públicos. Es el caso por ejemplo del Plan Bolívar 2000, los 500 millones de las prestaciones sociales de PDVSA, los 25.000 millones de dólares de CADIVI asignados a empresas fantasmas, etc.