¿Cuál Estado Financiero recomiendo a las empresas para la toma de mejores decisiones estratégicas en la actual crisis mundial?
El año 2020 va a pasar a la historia como uno de los períodos económicos más difíciles de la historia. Las noticias de esta semana muestran resultados preocupantes de los indicadores macroeconómicos en la Unión Europea, Estados Unidos, China, y de las principales empresas a nivel mundial. Podemos ya empezar a hablar de recesión y de deflación en algunos de los mercados más importantes.
La lenta recuperación económica que se está experimentando a nivel mundial, ocasionada principalmente por los rebrotes de la pandemia, y por los constantes roces entre Estados Unidos y China, me hace pensar que para finales del año 2022 o principios del 2023 podemos retomar los resultados financieros que existía al cierre de diciembre 2019, en la época prepandemia.
Los gobiernos están acostumbrados y tienen sus manuales de medidas económicas a desarrollar cuando se producen crisis originadas por guerras o quiebras de empresas estratégicas, pero no cuando son producidas por un virus. La situación actual está poniendo a prueba la creatividad y la unión de los gobiernos y empresas en buscar soluciones y adaptarse a la “nueva normalidad”.
En esta “nueva normalidad” los empresarios han tenido que adecuar sus instalaciones a las medidas sanitarias decretadas por los distintos gobiernos, adaptar sus sistemas al teletrabajo, restringir sus horarios, limitar la entrada de clientes, evitar despedir a sus empleados, mantenerse competitivos en el mercado, pagar sus deudas a tiempo, y mientras tanto evitar o minimizar las pérdidas.
Una de las herramientas que todo empresario tiene a su alcance, y debe usar en la situación actual para la toma de decisiones estratégicas, son la emisión y análisis de sus estados financieros. A través de estos informes el empresario tiene una visión de la situación actual y futura de su empresa.
De todos los estados financieros recomiendo el Flujo de Caja o efectivo, que es uno de los menos utilizados, pero en la situación actual adquiere una gran importancia, ya que va a permitir a la empresa analizar las necesidades futuras de efectivo. Con base en este informe los empresarios pueden tomar decisiones con suficiente tiempo como solicitar ayudas gubernamentales, préstamos bancarios, comprar inventario en los meses que baje su precio, o invertir en activos que se devalúen en esta época. El manejo de esta información de forma correcta y oportuna puede ser la diferencia entre la quiebra o el éxito de un negocio.
Es vital para todas las empresas mantenerse proactivas, flexibles, anticiparse al futuro, y tomar decisiones actuales que minimicen los impactos futuros. Los meses próximos van a ser muy difíciles, pero no toda la responsabilidad de la recuperación de esta situación depende de los gobiernos sino también de las decisiones y acciones que emprendan los empresarios y la población en general
