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Desviación de comercio versus creación de comercio

José Tomás Esteves Arria

Después de veinte años de negociaciones, el Mercosur bloque económico donde se agrupan Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay, logró concluir un tratado de libre comercio con la Unión Europea bloque que agrupa a su vez a las principales naciones europeas como Francia, Alemania, Italia, España, y otras más.

Según voceros del Mercosur, este acuerdo estratégico entre Mercosur y la Unión Europea (UE)lleva consigo la integración de un mercado de 800 millones de habitantes, casi una cuarta parte del PIB mundial y con más de US$ 100.000 millones de comercio bilateral de bienes y servicios.  Es un suceso extraordinario para la inserción internacional de  países como Argentina y Brasilpuesto que impulsará las exportaciones de las economías regionales, fortalecerá la participación de sus empresas en cadenas globales de valor, estimulará la llegada de inversiones, y además aceleraría el proceso de transferencia tecnológica e incrementaría por otra parte, la competitividad de la economía, todo lo cual impulsará una expansión de la producción y el aumento del empleo de calidad.  Además, constituye un sello institucional que da carácter permanente a la relación estratégica con la UE, garantizando transparencia, previsibilidad y reglas claras para los actores económicos.

La UE es el primer inversionista global, con un acervo de inversiones que supera el 30% del total mundial. De igual modo, importa el 17% del total de las compras mundiales de bienes y servicios y representa el 20% del producto de la economía internacional. El acuerdo dará oportunidades para exportar a un mercado con más de 500 millones de habitantes con un PIB per persona promedio de US $ 34.000 y los países de Mercosur podrán acceder a una oferta más diversa y de mayor calidad de productos a precios más competitivos para sus industrias y  sus consumidores.

El comercio internacional no es un juego de suma-cero en el sentido de que lo que gana un país lo pierde otro.  Mientras más libre sea el comercio mundial más ganarán los consumidores y los productores, los más representativos representantes de los agentes económicos.

Bajo este contexto, la integración económica internacionalgeneravariaciones en la eficiencia global, es decir, en el potencial total de producir bienes y servicios que satisfagan necesidades humanas, y en la forma de distribución de lo producido. Pero, como no es posible comparar las ganancias de unos con los perjuicios de otros, la Teoría de la Integración Económica se apoyó en sus comienzos en analizar susefectos sobre el sistema productivo, soslayando los efectos redistributivos. Indiscutiblemente esto ha dado lugar  a análisis críticos alternativos que intentancuantificar los efectos de la integración sobre el bienestar social, es decir, considerando conjuntamente todos los resultados y sus consecuencias.

La teoría indica también la diferenciación entre efectos estáticos y dinámicos de las uniones aduaneras. Los efectos estáticos serían principalmente los de la reasignación de recursos en el sistema productivo, los de las modificaciones en la estructura y modos de consumo. Los efectos dinámicos son las consecuencias a más largo plazo sobre la tasa de inversión, el progreso tecnológico y el crecimiento. Es posible que los efectos estáticos y los dinámicos se gesten en sentido opuesto; en otras palabras, siempre es posible que las consecuencias sean perjudiciales a corto plazo y positivos a largo plazo o viceversa.

Jacob Viner, uno de los mejores estudiosos de la Teoría de las Uniones Aduaneras señaló a este respecto, dos efectos principales, el de desviación de comercio y el de la creación de comercio.

Así pues, la creación de comercio es el incremento del volumen del comercio entre países cuando se acuerda la unión aduanera entre ellos. Mientras que  la desviación de comercio consiste en que parte de los flujos de importación y exportación que existían antes de un acuerdo de unión aduanera entre cada uno de los países firmantes del acuerdo con terceros países, serán sustituidos por importaciones y exportaciones desde y hacia los países miembros de la unión, desviándose así las rutas comerciales internacionales preexistentes.

La desviación de comercio es de por sí intrínsecamente un efecto negativo o perjudicial puesto que implica sustituir el producto más eficiente por el menos eficiente.   Un ejemplo:antes de que hubiera unión aduanera, el país A importaba camisas de seda del país B porque era este el que las producía con una mejor calidad-precio. Cuando el país A estructura un acuerdo de unión aduanera con el país C, las camisas procedentes de C resultarán más baratas que las del país B ya que las de éste tendrán que pagar un arancel aduanero superior. La desviación de comercio que se ha producido ha perjudicado al país que producía camisas de forma más eficiente.  Por tanto, considerando la economía global, la eficiencia ha disminuido y los recursos (la seda, en este ejemplo) irá posiblemente al país que es menos eficiente en su uso.

En cualquier caso, para poder tomar en cuenta  la desviación de comercio como negativa para la eficacia hay que partir del supuesto de que la situación anterior era la más eficaz, lo cual tal vez  nosea verdad. El mercado mundial siempre ha estado muy distorsionado y las razones por las que el país A importaba camisas del país B podrían ser muy diversas y no necesariamente implicar que B era el más eficiente. En última instancia, simplemente la existencia de aduanas y de un mercado interior protegido por las fronteras de A implica también la existencia de ineficiencias de partida.

La formación de cualquier unión aduanera siempre da lugar a la gestación tanto de fenómenos de creación como de desviación de comercio y la eficiencia global mejorará, según Viner, siempre que la creación de comercio supere a la desviación de comercio. Sin embargo, esta comparación es muy difícil de realizar.

En los actuales momentos en que escribimos estas líneas, un informe del InstituteNational de la RechercheAgronomique citada por varios medios, describe que Francia importó bebidas y alimentos por valor de 38,4 millones de euros de los países de la UE como España, Bélgica, Holanda, Alemania, Italia, y el Reino Unido en el año 2018. A su vez, la nación gala exportó a la UE alimentos por valor de 38,1 millones de euros.  También las fuentes dicen que Francia es una nación increíblemente protectora de su sector agrícola.  En efecto, hasta el presidente de Estados Unidos Donald Trump ha amenazado con aumentar los aranceles a los productos franceses, debido a que Francia impide con ciertos requisitos importaciones de alimentos de Estados Unidos. Inclusive el sector quesero francés se ha visto desplazado por los quesos irlandeses y holandeses.  De modo pues, que el gran pacto entre el Mercosur y la UE tendrá muchos efectos de creación como de desviación de comercio.

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