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El mea culpa de Jorge Giordani

El ex ministro Jorge Giordani, quién habría sido sustituido por desleal y traidor a la revolución bolivariana venezolana de la cual formó parte, fue uno de los íntimos colaboradores del difunto Hugo Chávez en la planificación, desarrollo e implantación de las políticas económicas de ésta.

Su larga carta, la cual estimo es un gran mea culpa personal, en la cual señala irregularidades, acusaciones, críticas, errores y actos grotescos de corrupción dentro del régimen chavista, con especial énfasis en el gobierno del presidente Nicolás Maduro. Este mea culpa lo escribió, debido al peso que ha tenido en su conciencia, por sentirse culpable del gran desastre económico, moral, político y social que contribuyó a crear y posiblemente esté sinceramente arrepentido.

Este confuso y revelador mea culpa acusador, de Jorge Giordani por el desastre que vivimos los venezolanos, me recuerda al de Miguel Ángel Quevedo, famoso editor cubano de la revista Bohemia, quién apoyó y colaboró con la revolución cubana, la cual luego de consolidarse, le quitó su revista y empezó a perseguirlo, razón por la tuvo que exilarse en los EE.UU., país este donde se suicidó, luego de escribir su impactante y famoso mea culpa.

Algunos analistas se han precipitado en señalar, que con el cambio de Jorge Giordani por Menéndez, se facilitaría el cambio profundo de dirección que requiere el gobierno en sus políticas públicas y económicas.  No se podría estar más equivocado al pensar así. La salida de Jorge Giordani del gabinete, se ha hecho por castigo al traidor y desleal,  quién según explica, vendría opinando internamente en un cambio de dirección en las políticas económicas, posición ésta que seguramente encontrara oposición férrea de los radicales del régimen. Soy de los que piensa, que a Jorge Giordani lo traiciono su conciencia, la cual llegó a pensar no tenía y se equivocó, la tiene.

Si algún lector suspicaz a estas afirmaciones tiene dudas,  le sugiero que vea las declaraciones del vicepresidente Arreaza, quién evidentemente aún defiende a la revolución, enfatizando que las políticas económicas de  la misma han sido exitosas y que solo han mostrado una pequeña parte de las grandes bondades y beneficios de ésta para el disfrute de los venezolanos.

Si los amigos lectores se atreven por un momento a cuantificar y a imaginarse los grandes destrozos y daños reales que ha hecho este régimen a la nación venezolana, a nombre de la revolución bolivariana, se podrán dar cuenta, que cualquier persona mentalmente sana que haya contribuido con el mismo; en algún momento de lucidez, tendrá que aceptar con horror de la culpa directa que le corresponde  reconocer como actor de ese irreparable desastre.

No me cabe la menor duda, que con el caso Jorge Giordani, no habrá rectificación de rumbo en las políticas económicas y públicas del régimen, que la lógica y sensatez demandan. Esto lo ha demostrado y seguiría demostrándolo el régimen tozuda y fehacientemente una y otra vez.

Solo habrá paños de agua tibia para seguir engañando y confundiendo a la población. Lo que si presiento que pueda ocurrir, es un sinfín de mea culpas de funcionarios culpables del desastre, quienes intentarían lograr su absolución o atenuación de culpa por su participación en el caos.

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