El Problema del Transporte Público en Nuestro País
Estaba esperándolo desde temprano. Teníamos pautada nuestra reunión a las 9:30 a.m. Él venía desde Caricuao. Me escribió a las 7:30 diciéndome que estaba en la estación del metro. Eran las 9:30 a.m. y no había llegado. Historias como esta se repiten frecuentemente. El metro no está funcionando bien. Las instalaciones están sucias. Hay que esperar mucho tiempo. No estamos tan mal como en otros países pero estamos muy lejos de estar donde podríamos estar. Esto no es así solo con relación al metro. Esto no es así solamente con relación al transporte público. Hay tanto por hacer, tanto por mejorar, tanto por transformar…
¿Cuánto tiempo perdíamos diariamente por falta de un sistema de transporte público eficiente?…¿Por qué el gobierno no había logrado que el sistema funcionara?…¿Por qué otros países sí lo lograban?…
Había estado en numerosos países donde había tranvía, trenes, autobuses, metro…Todo funcionaba a la perfección. Uno podía saber exactamente a qué hora pasaría el próximo mecanismo de transporte. Las rutas estaban perfectamente diseñadas. Cada quién sabía cuándo y cómo llegar de un lugar a otro. Se podía calcular perfectamente el tiempo. Si no se llegaba a la hora determinada para tomar el transporte deseado, se sabia exactamente cuándo podría tomarse el siguiente. En las estaciones había pantallas que permitían ver cuándo llegaría el próximo autobús o tranvía, o metro, o tren.
Existen los sistemas. Existen los especialistas. Existen las personas jurídicas y naturales capaces y con experiencia en servicios de transporte público. No hay nada que justifique que en todos estos años, Venezuela haya sido incapaz de tener un sistema de transporte público que funcione.
Requerimos con urgencia que las autoridades responsables se avoquen a solucionar el problema del transporte público en nuestro país, en cada una de nuestras ciudades y poblados. No más autopistas sin terminar. No más infraestructura pudriéndose. No más proyectos paralizados.
Exijamos a quienes tienen la responsabilidad de cumplir y el poder para hacerlo.