El que tiene tejado de vidrio… no tire piedras…
Isaías Márquez
El presidente Maduro otra vez, mediante su cualidad irreflexiva habitual ahora pronuncia otra barbaridad al pretender estigmatizar como “mendigos” a los jóvenes que han emigrado de Venezuela, sin antes meditar acerca de unos sobrinos condenados a 18 años de prisión en EUA por narcitráfico, allá en el borte que tanto objeta, de donde abre la puerta al FBI para que investigue el magnicidio frustrado en su contra y, de paso, pide a la Casa Blanca “desmembrar” grupos “terroristas” en Florida, porque bien sabe que los procedimientos judiciales de allá, son realmente efectivos y muy precisos, aunque no dudamos que tal actitud hacia el FBI y la WH, constituya otra de sus “maduradas” farisaicas e impertinentes.
Entienda el “señor presidente” Maduro que la mayoría de nuestros jóvenes emigran huyendo de la crisis sociopolítica/socioeconómica por su régimen/ideología retardatorio, legado del “comandante eterno y supremo” al no dejarse sujetar la barriga mediante dádivas (bonos) que están promoviendo una sociedad improductiva y parásita de gente trajeada de rojo, genuflexa ante el estalinopresor de cualidades sofistas por mantenerse en el reino de la corrupción y opresión estalinistas, que induce en nuestros jóvenes la convicción de que su país ha tocado un fondo del cual resurgirá cuando se deslastre de semejante rémora dictatorial.
Posiblemente, también él tuvo que emigrar, lo cual no constituye delito ni ofensa ya que casi todos quienes habitamos en este país somos descendientes de europeos emigrados, quienes por sus vivencias sí nos legaron unos valores y cultura de dignidad que nos permitieron lograr y forjar lo que hoy día, honrosamente, disfrutamos, sin necesidad de evocar seudohéroes madrugadores, lobos con piel de ovejas.